El tráfico de trenes continúa interrumpido hoy en Francia luego de que los trabajadores del sector extendieron su paro por octavo día para expresar su oposición a la reforma del sector ferroviario ante el temor del deterioro de sus condiciones de trabajo y la pérdida de empleos.
En espera de una marcada mejoría en el tráfico, la Sociedad Nacional de Ferrocarriles de Francia (SNCF, por sus siglas en Francés) calculó un promedio de 60 por ciento de trenes en las principales rutas, y seis de cada 10 trenes están en operación en la Ile-de-France, el área metropolitana de París.
La compañía estatal de ferrocarriles señaló signos de debilitamiento de la huelga porque hoy hubo una participación de 11,8 por ciento de los trabajadores, en comparación con el 14,1 del martes.
"El gobierno está abierto al diálogo. Considera que la reforma es indispensable. Considera que los franceses tienen derecho a un servicio público que funcione", dijo el primer ministro Manuel Valls.
"Considera que el derecho a huelga es un derecho constitucional pero no puede ser ejercido bajo las condiciones que hoy son incomprensibles para la mayoría de nuestros ciudadanos", añadió en la Asamblea Nacional, donde presentó a debate la reforma de ferrocarriles.
Una encuesta de Harris Interactive publicada el martes señala que 76 por ciento de los entrevistados se opone a la huelga y no entiende la demanda de los huelguistas.
Temiendo el deterioro de las condiciones de trabajo, los sindicatos convocantes del paro, la Confederación General del Trabajo (CGT) y Rail-Sud, rechazan con firmeza la propuesta del gobierno de que SNCF y la Red Ferroviaria de Francia (RFF) formen un sólo conglomerado para poner bajo control las elevadas deudas del sector ferroviario, que actualmente ascienden a 40.000 millones de euros (54.270 millones de dólares USA) y que podrían duplicarse para el 2025.
"Gracias a nuestra acción, se han presentado enmiendas y parece que el gobierno toma en cuenta el equilibrio de poder existente. Ahora, las enmiendas deben ser escritas con precisión, discutidas en la Asamblea Nacional y votadas", declaró Thierry Lepaon, secretario general de CGT a Radio Francia.