Las empresas brasileñas deberán aumentar en un 30 por ciento el sueldo de los trabajadores que usan las motos por motivos laborales como plus por el peligro que ello comporta, según una nueva norma aprobada hoy.
La presidenta del país, Dilma Rousseff, sancionó hoy la nueva ley, que beneficia directamente a mensajeros, entregadores y transportadores que utilizan motocicletas en las grandes ciudades para eludir los embotellamientos de tránsito.
"Es una categoría que enfrenta el tránsito, que enfrenta todos los peligros consecuentes de andar en motocicleta y que, en algunos momentos, tienen que cumplir horarios (de entrega). Esa categoría tiene derecho a ese adicional por peligrosidad", explicó Rousseff tras sancionar la norma.
La presidenta de Brasil dijo que el Gobierno está estudiando otras medidas para proteger a los conductores de motos, como la creación de corredores de circulación exclusiva para las motos, y descartó que la nueva ley suponga un despido masivo de los conductores de motos por el coste adicional que les supondrá ahora a las compañías.
"El entregador de moto es una realidad en los grandes centros urbanos de Brasil. Las empresas necesitan de ellos para llevar y traer cosas de urgencia. Él tiene un papel importante en la logística de la distribución. Su función no es superflua", sostuvo.
La flota de motocicletas en Brasil creció de los 2,8 millones en 1980 hasta los 18,4 millones en 2011, mientras que las muertes en motociclistas (el 4 por ciento del total en 1996, pasaron a ser el 33,9 por ciento en 2011). En 2011, se registraron 14.666 muertos en Brasil por accidentes de moto.