Pekín, 26/01/2015(El Pueblo en Línea)-Oficiales que trabajan en una prisión china han negado que uno de los prisioneros mientras cumplía su condena mantenía relaciones sexuales con la esposa de un policía, según informes.
Una investigación preliminar evidenció que el prisionero, apellidado Wang, utilizaba teléfonos móviles para chatear con diferentes mujeres. Dos de ellas le entregaron a Wang los teléfonos después de pagarle 200 yuanes (32 dólares) a un policía del penal.
Los teléfonos móviles de Wang ya han sido confiscados.
Con la ayuda de algunos funcionarios de la prisión, Wang pudo tener intimidad con dos mujeres, simulando estar casados.
Zhou Chao, reportero de the paper.cn con sede en Shanghai, comentó que Wang mantenía relaciones sexuales dentro de una oficina con una de las dos mujeres — que en informes anteriores fue identificada como la esposa de un policía del penal — después de pagarles 3 mil yuanes.
En noviembre, la policía presentó un informe a la prisión acusando a Wang de amenaza y acoso.
Los agentes negaron que Wang tuvo relaciones sexuales dentro de la cárcel, pero el equipo de investigación está tratando de recuperar los registros de video para llegar a sus propias conclusiones.
Wang, de 28 años, desde el año 2005 ha sido encarcelado tres veces. En septiembre de 2012 fue sentenciado a seis años de privación de libertad.
Desde la cárcel, Wang estableció relaciones con varias mujeres a través de WeChat y le estafó 80.000 yuanes a una que vivía cerca.
Hasta ahora, seis oficiales de la prisión Nehe han sido despedidos o han recibido advertencias, comenta el informe.
"Es fácil para las prisiones no respetar las reglas. Debido a sus condiciones de aislamiento son inmunes al eficiente control externo, lo que puede provocar irregularidades y corrupción, incluso judicial,", advirtió Cheng Lei, profesor de derecho de la Universidad Renmin de China. "Es necesario poner las cárceles bajo una supervisión efectiva, con una mayor transparencia en la gestión".
Qiao Zhifeng, comentarista de los medios de comunicación, opinó, "las autoridades deben minuciosamente investigar este caso e identificar los vacíos de control y supervisión en la administración de prisiones que han quedado expuestos".
(Editor:Rosa Liu,Rocío Huang)