El gobierno checo decidió hoy que el país gastará 60 millones de coronas (cerca de 2,44 millones de dólares) en ayudar a los refugiados de las zonas afectadas por conflictos armados o por desastres humanitarios o naturales.
El dinero se dirigirá principalmente a Medio Oriente, afligido por el conflicto en Siria.
Del total, alrededor de 45 millones de coronas (alrededor de 1,83 millones de dólares) serán enviadas a la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) que busca estabilizar la situación en el mayor campamento de refugiados en Jordania, al que los refugiados sirios están llegando.
Cerca de cinco millones de coronas (alrededor de 200.000 dólares) serán otorgados al Ministerio de Relaciones Exteriores de Dinamarca que se unió al proyecto de apoyo a los refugiados sirios en Jordania, Irak y Líbano.
Los restantes 10 millones de coronas (cerca de 400.000 dólares) serán enviados a Turquía para reforzar las capacidades relacionadas con los refugiados.
El gobierno checo aprobó en enero un programa para ayudar a los refugiados en el extranjero, el cual recayó en el Ministerio del Interior. El nuevo programa Medevac ha complementado el programa de evacuación humanitaria de las personas que padecen problemas de salud urgentes.
Las prioridades del nuevo programa de ayuda externa son Medio Oriente, el sureste de Europa y el norte de Africa con el agudo problema de refugiados.