LONDRES, 31 jul (Xinhua) -- ¿Podrá una pieza de avión de dos metros de largo generar nueva esperanza con respecto a la localización del avión desaparecido que realizaba el vuelo MH370? Probablemente no, señalan algunos expertos.
La pieza encontrada en la isla Reunión, según informes un flaperón, "casi con seguridad" pertenece a un Boeing 777, indicaron funcionarios de Malasia. Y el único avión 777 en el océano Indico que pudo haber llevado a este objeto a flotar en la zona es el que realizaba el vuelo MH370, indicaron investigadores.
La pieza será trasladada a Francia para su análisis y se espera que los resultados finales sean anunciados muy pronto.
"Incluso si quedara claro que pertenece a un Boeing 777 tendrían que asegurarse de que el número de serie coincidiera con el avión original", dijo a Xinhua el profesor Graham Braithwaite, un experto en investigación de accidentes aéreos de la Universidad de Cranfield, en donde se realizan algunas de las principales investigaciones aeroespaciales de Reino Unido.
Aunque dijo que es muy poco probable que una pieza de avión 777 termine en el mar en una circunstancia que no sea un evento catastrófico en vuelo, no es imposible que se trate de una pieza transportada en un contenedor, por ejemplo.
El avión de Malaysia Airlines que realizaba el vuelo MH370 de Kuala Lumpur a Beijing desapareció en marzo de 2014 con 239 pasajeros a bordo. Tomando como base las señales emitidas por el avión y detectadas por satélite, se cree que el avión se estrelló en el sur del océano indico.
Las autoridades han centrado sus esfuerzos de búsqueda en una zona cercana a la costa sudoccidental de Australia, la cual se ubica a cerca de 4.000 kilómetros al este de la isla Reunión.
El hecho de que esta pieza de avión haya aparecido en la isla Reunión corrobora la creencia de que, con base en los datos satelitales rastreados por Inmarsat, el avión terminó en algún lugar del océano cerca de la costa sudoccidental de Australia, dijo Braithwaite.
Pero después de tanto tiempo, los oceanógrafos no podrían reducir la búsqueda del punto de impacto a una zona más precisa que la zona actual de búsqueda, dijo.
"En otras palabras esto corrobora la teoría más firme con respecto a dónde se encontrarán los restos, más que añadir más detalles a ella", dijo.
Su opinión fue apoyada por el profesor Keith Haines, un oceanógrafo del Departamento de Meteorología de la Universidad de Reading.
Haines dijo a Xinhua que los avances más recientes no ayudarán a reducir la zona de búsqueda actual. "Ha pasado demasiado tiempo desde el accidente como para determinar algún detalle de la ruta de deriva del avión con modelos de las corrientes".
Si se mantienen en la superficie, otros restos podrían terminar en sitios muy diferentes del océano Indico porque la zona de dispersión podría ser amplia, dijo.
Haines señaló con anterioridad que las corrientes pueden ser fuertes por lo que los restos pueden desplazarse hasta 1.000 kilómetros en dos semanas. "Pero las corrientes no siempre viajan en línea recta. Pueden serpentear y los restos en la superficie pueden ser lanzados por el viento si se proyectan fuera del agua".
Pero de todos modos hay quien considera que encontrar restos constituye la mejor posibilidad para localizar el sitio de impacto.
"Ahora, el 'santo grial' es determinar la ubicación de la caja negra del avión que se cree que debe estar muy cerca del sitio de impacto. La mejor manera de lograr esto sería encontrar más restos y después aplicar las mismas simulaciones para rastrear su origen en el océano", dijo el Dr. Erik van Sebille, oceanógrafo del Instituto Grantham del Imperial College de Londres.
Este proceso de triangulación realmente es "la mejor oportunidad que tenemos" de ubicar el sitio en el mapa, dijo.
(Editor:Rosa Liu,Rocío Huang)