Un niño duerme en el hombro de una mujer en Jinan, capital de la provincia china oriental de Shandong, 16 de marzo de 2015. El 21 de marzo se celebró el 15º Día Mundial del Sueño. (Xinhua/Guo Xulei)
BEIJING, 8 may (Xinhua) -- La presión social está obligando a las personas a dormir menos de lo que necesitan, lo que contribuye a una "crisis mundial del sueño", indicaron científicos en un nuevo estudio basado en datos recabados de una aplicación de teléfono inteligente.
Investigadores de la Universidad de Michigan rastrearon los patrones de sueño de alrededor de 6.000 personas en 100 países y analizaron sus conexiones con edad, género, exposición a la luz natural del día, así como presiones culturales.
"Los efectos de la sociedad sobre el sueño han sido poco cuantificados", se señaló en el estudio publicado hoy en la revista Science Advances.
"Encontramos que la presión social debilita u oculta los factores biológicos durante la noche, lo que conduce a los individuos a dormirse más tarde y a reducir su tiempo de sueño", añadió el estudio.
La falta de sueño se presenta principalmente cuando la gente se va a la cama, encontró el estudio.
Los hombres de mediana edad son los que menos tiempo duermen, menos de las siete a ocho horas recomendadas. La edad es el principal factor que determina la cantidad dormida.
La investigación está basada en los datos recabados a través de la aplicación gratuita Entrain, lanzada en 2014 para ayudar a los usuarios a combatir el desfase horario
El sueño es dirigido por un reloj "circadiano" interno, un conjunto de 20.000 células nerviosas del tamaño de un grano de arroz ubicadas detrás de los ojos, el cual se ajusta conforme a la cantidad de luz capturada, especialmente la luz natural.
Las personas de Singapur y Japón son las que menos tiempo duermen, con un promedio de siete horas y 24 minutos, mientras que las de Holanda son las que más duermen, con un promedio de ocho horas 12 minutos, según el estudio.
Aunque una diferencia de 48 minutos podría parecer trivial, dormir 30 minutos menos puede tener efectos significativos en la función cognitiva y en la salud, dijeron los investigadores.
"Los problemas de sueño representan una amenaza inmediata y apremiante para la salud humana", dijo el estudio.
(Editor:Rosa Liu,Rocío Huang)