Por Wu Zhenglong
El mes venidero, los días 4 y 5, China acogerá la Cumbre del G-20 en Hangzhou, ciudad turística muy conocida por su Lago del Oeste. [Foto: Xinhua]
Hangzhou,22/08/2016 (El Pueblo en Línea) - Los efectos persistentes de la crisis financiera del 2008 siguen impidiendo que la economía mundial vuelva a su normal desempeño. La recuperación sigue siendo lenta, débil y llena de incertidumbres.
Los riesgos de una mayor desaceleración económica se mantienen y los mercados financieros siguen enrevesados e inestables. El proteccionismo comercial y de inversión va en aumento mientras el desarrollo económico se desequilibra. Según el último informe del Banco Mundial, la previsión del crecimiento global de este año se ha reducido desde el 2,9 por ciento en el mes de enero a un 2,4 por ciento en junio pasado.
En un momento tan crítico, China tiene el deber, la capacidad y la confianza para buscar un mayor consenso entre los miembros del G-20. La próxima Cumbre del G-20 en Hangzhou decididamente abrirá nuevos caminos para el desarrollo económico mundial.
El tema "Hacia una innovadora, vigorizada, interconectada e inclusiva economía mundial" no podría no sea más pertinente. China también ha propuesto cuatro elementos principales para la agenda del G-20 en Hangzhou: la exploración de modelos de crecimiento más eficientes, a través de la innovación; la mejora de la gobernanza económica y financiera globales; la intensificación del comercio y la inversión internacional y el establecimiento de caminos interconectados e inclusivos para el desarrollo.
Es esencial para los miembros del G-20 ponerse de acuerdo sobre soluciones prácticas y trenzar un plan de acción sobre los tema y el orden del día, ya que la tarea central de la Cumbre del G-20 en Hangzhou será la exploración de nuevas formas de aprovechar el potencial existente y encontrar nuevas fuentes de crecimiento.
La Cumbre de Hangzhou llega acompañada de un "Proyecto G-20 para la Innovación Relacionada con el Crecimiento". Aprovechando las nuevas oportunidades que presenta la creación de nuevas tecnologías, nuevas industrias y nuevos factores de reformas estructurales, cabe esperar que se pueda resolver el principal obstáculo: fortalecer el débil crecimiento económico. En el contexto de este proyecto, la Cumbre del G-20 en Hangzhou formulará una serie de planes de acción para promover la innovación como uno de los motores esenciales de ese derrotero.
Por otra parte, los miembros del G-20 fortalecerán la coordinación de políticas macroeconómicas y la comunicación intergubernamental, con miras a mitigar la incertidumbre y los efectos secundarios negativos de sus políticas nacionales. También se comprometen a no promover la devaluación competitiva de sus monedas e intensificar la cooperación en la supervisión financiera, tributación internacional, energía, lucha contra la corrupción y otras áreas vitales. Acelerar el ritmo de la reforma de las instituciones financieras internacionales, incluido el sistema del FMI, las estructuras de gobierno y el sistema de la Junta General de Accionistas del Banco Mundial. A su vez se hace imprescindible y necesario potencializar la voz de los países emergentes en los organismos financieros internacionales
Para promover el comercio y las inversiones internacionales, con el fin de inyectar mayor vitalidad a la economía mundial, la Cumbre de Hangzhou formulará, por primera vez una "Estrategia G-20 para el Crecimiento del Comercio Mundial" y un "Guía G-20 para la Política de Inversión Global". Aquellos miembros que no han ratificado el “Acuerdo G-20 de Facilitación del Comercio” serán conminados a hacerlo, con el fin de avanzar en su puesta en práctica tan pronto como sea posible.
La Cumbre de Hangzhou será la voz de una oposición explícita al proteccionismo comercial. Tomará una decisión para ampliar la "moratoria a las nuevas restricciones comerciales y las medidas proteccionistas" hasta el año 2018. La política financiera, la política fiscal y comercial y la política de inversión se describe a menudo como los tres pilares de la economia global. Sin embargo, el tercer pilar se encuentra débil. La próxima Cumbre G-20 debe ser testigo de un fortalecimiento de la política de inversión.
Por primera vez, la Cumbre del G-20 en Hangzhou concederá máxima prioridad a la cuestión del desarrollo dentro del marco macroeconómico mundial y formulará un plan de acción centrado en la aplicación de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible. Tal plan de acción ayudará a los países africanos y los países menos desarrollados a que aceleren su proceso de industrialización e inyectará un fuerte impulso a los esfuerzos mundiales para reducir la pobreza y promover el desarrollo sostenible.
Con estos resultados, la Cumbre del G-20 de Hangzhou será recordada como un hito en el desarrollo internacional.
El autor es investigador de la Fundación China para Estudios Internacionales.
(Editor: Elena G.,Rocío Huang)