Un millón podrían ser desplazados por campaña militar para recuperar Mosul

Actualizado a las 20/10/2016 - 09:20

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El relator especial de la ONU para los derechos humanos de los desplazados internos, Chaloka Beyani, advirtió hoy que en el peor de los casos, un millón de personas podrían ser desplazadas por la campaña militar de las fuerzas iraquíes para recuperar Mosul de manos del Estado Islámico (EI).

Beyani dijo además que cerca de 700.000 personas en Mosul podrían requerir refugio de emergencia tras la intensificación de los combates y sus posibles consecuencias humanitarias.

De acuerdo con cifras de la ONU dadas a conocer a principios de la semana, cerca de 1,5 millones de hombres, mujeres y niños podrían verse afectados por la campaña militar y se espera que 200.000 sean desplazados en las primeras semanas.

"Aunque las agencias humanitarias han tomado medidas como preparación para la ofensiva con el fin de asegurarse de que las necesidades de protección sean cubiertas y de que la asistencia humanitaria esté lista para ser distribuida, los acuerdos para una salida segura y digna no han recibido suficiente atención", dijo Beyani.

En una declaración escrita emitida hoy, el experto, quien realizó una visita oficial a Irak en mayo de 2015, pidió a todos los involucrados respetar sus obligaciones de conformidad con el derecho internacional en relación con la protección de los civiles.

"Se deben establecer sistemas apropiados para la evacuación de emergencia de civiles en situación de riesgo de las áreas de conflicto o de las áreas que siguen siendo inseguras y se debe garantizar su acceso a asistencia vital de emergencia como alimentos, agua y atención médica", agregó.

Las fuerzas de seguridad iraquíes lanzaron el lunes una importante ofensiva encaminada a liberar la ciudad de Mosul, el último gran baluarte de los militantes del EI en Irak.

Mosul, ubicada a cerca de 400 kilómetros al norte de Bagdad, la capital iraquí, está bajo control del grupo desde 2014 cuando las tropas iraquíes abandonaron sus armas y huyeron, lo que permitió al EI controlar partes del norte y el este de Irak.