Presidente uruguayo cumple dos años de gobierno

Actualizado a las 02/03/2017 - 08:35

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Al iniciar su tercer año de gestión, este miércoles, el presidente uruguayo Tabaré Vázquez tiene por delante desafíos económicos y políticos y una elección, que ya aparece en el horizonte, para definir a su sucesor, con pronóstico reservado.

Con dos años cumplidos en su segundo mandato, Vázquez parece tener en sus manos la continuidad de la era del izquierdista Frente Amplio (FA), en el poder desde 2005, cuando él mismo inició un primer mandato hasta 2010, gestión que luego continuó su compañero de partido, José Mujica, hasta 2015.

DESAFIOS

El abultado déficit fiscal (4 por ciento) es una de las mayores preocupaciones para la economía, saldo en rojo que se registra cuando el gobierno aún debe cumplir promesas electorales como el sistema de cuidados para niños y adultos mayores y destinar más recursos para la educación.

El desvelo para esta administración es asegurarse que la papelera finlandesa UPM concrete su segunda planta de celulosa con una inversión de 4.000 millones de dólares, proyecto que puede generar un "efecto derrame" en la economía.

En lo político, el FA perdió al legislador 50 que le daba la mayoría automática en la Cámara de Diputados y ahora debe intensificar la búsqueda de acuerdos con los partidos opositores, tarea nada fácil.

Por su parte, la economía crece a tasas modestas (la expansión en 2016 sería del 1 por ciento), pero crece al fin, en un mundo cargado de incertidumbre económica y política.

Hace pocos días, Vázquez realizó un balance positivo de los avances que arrojan estos años de gobierno del FA.

"La pobreza en mi país era más del 38 por ciento. Este año, (se sitúa en) 8 por ciento. Llegamos al gobierno en 2005 y la desocupación era del 17 por ciento, ahora es de un 7,5 por ciento", señaló el mandatario, de 77 años.

Además, "la mortalidad infantil era de dos dígitos por 1.000 niños nacidos vivos, hoy es la históricamente más baja: 7,4 cada 1.000 niños nacidos vivos. El salario mínimo nacional, en 11 años, aumentó un 251 por ciento".

"La recuperación salarial, en estos 15 años de gobierno del Frente Amplio fue de más del 50 por ciento para los trabajadores uruguayos", sostuvo al mencionar los logros.

La plataforma dedicada a la verificación de datos "UyCheck" evaluó las promesas electorales de Vázquez y su discurso de asunción el 1 de marzo de 2015.

De las 220 propuestas hubo un nivel de cumplimiento de 24 por ciento, según "UyCheck".

Las áreas con mejor desempeño en estos 24 meses fueron derechos humanos (56 por ciento), seguridad (42 por ciento) y medios de comunicación (39 por ciento).

Según el informe, el nivel de cumplimiento general "ha mostrado un avance significativo en cada medición".

El politólogo Adolfo Garcé opinó que el segundo año del tercer mandato del FA arroja un saldo "menos magro que el 2015".

"Asistimos al repunte del liderazgo presidencial. El punto más alto en materia de gobierno fue el ajuste fiscal", señaló a una serie de aumentos de impuestos que rigen desde enero para reducir el déficit.

"La cuenta pendiente más dolorosa sigue siendo la falta de coraje para emprender cambios ambiciosos en la educación", resaltó el investigador del Instituto de Ciencia Política.

También advirtió que la pérdida de la mayoría automática en la Cámara de Diputados "dejó al FA sin mayoría parlamentaria por primera vez", lo cual "constituye un punto de inflexión en materia de gobernabilidad".

El nivel de aprobación a la gestión de Vázquez se situaba en 35 por ciento en diciembre, según la última encuesta de Equipos, repitiendo así el porcentaje que arrojó el anterior sondeo de la consultora.

En tanto, la desaprobación al mandatario de izquierda disminuyó de 37 a 36 por ciento, mientras que un 28 por ciento ni aprueba ni desaprueba su desempeño.

Vázquez inició el tercer gobierno consecutivo del FA con una aprobación del 50 por ciento y un 15 por ciento de desaprobación.

La Constitución uruguaya impide la reelección del presidente en un mandato consecutivo.

En los tres años de gobierno restantes, el gobierno deberá dar señales claras de mejora a nivel económico para posicionar con mayor fuerza al FA en las elecciones presidenciales y legislativas de octubre de 2019.

Según la última encuesta de Equipos, el FA tiene una intención de voto del 32 por ciento, apenas por encima del opositor Partido Nacional (PN), con 31 por ciento, con lo cual se prevé un final de difícil pronóstico para los próximos comicios.