Anuncio del minorista de comercio electrónico JD.com Inc en Shanghai. [Foto: China Daily]
Shanghai, 05/04/2017 (El Pueblo en Línea) - En una reciente reunión convocada por la Administración Estatal de Impuestos y la Federación de Industria y Comercio de China, con el objetivo de profundizar una reforma fiscal que impulse el desarrollo de empresas privadas, Liu Qiangdong, CEO de JD.com, pidió que también se concediera a las pequeñas empresas de comercio electrónico las mismas reducciones o exenciones fiscales que tienen las pymes chinas de comercio fuera de línea.
De un tiempo a esta parte, entre algunos economistas ha prevalecido el criterio de que la permanente caída de las ventas del comercio físico, de la economía real, ha sido causada por el auge del comercio electrónico. Y que, sin embargo, la actividad comercial en línea casi no paga impuestos.
El hecho es que todas las empresas registradas en China, ya sea en línea o fuera de línea, están obligadas a pagar impuestos. Además, debido a sus registros electrónicos más explícitos y rastreables, los vendedores minoristas del comercio electrónico encuentran mucho más difícil la evasión de su contribución social.
Las pequeñas empresas, tanto en línea como fuera de línea, son agentes activos de la economía china y hoy se entrelazan en el “internet de las cosas” que ha penetrado en todos los aspectos de la vida cotidiana. Si a las pequeñas empresas en línea se les niega el acceso a políticas fiscales preferenciales, existirá una contradicción entre tal decisión y la macropolítica de fomentar -a gran escala- el empresariado y la innovación.
Para facilitar el emprendimiento masivo y la innovación, tanto las empresas físicas como las virtuales deben ser alentadas para que logren contribuir activamente al desarrollo del país. La imposición de altos impuestos a los pequeños y medianos negocios electrónicos es muy probable que ahogue algunos proyectos innovadores y reduzca la vitalidad económica del país, comprometiendo su ritmo y desarrollo económico.
Las políticas fiscales preferenciales para las pequeñas y medianas empresas chinas deben ofrecerse sin considerar si operan en línea o fuera de línea. Cualquier tratamiento diferenciado no será razonable ni justo.
(Web editor: Elena G., Rocío Huang)