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Complementación, el futuro de universitarios chinos y latinoamericanos

Actualizado a las 08/05/2018 - 16:01
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Por Gerardo Laborde

MONTEVIDEO, 7 may (Xinhua) -- América Latina y China tienen un largo camino por recorrer en materia de intercambio universitario y científico.

La doctora en matemática argentino-uruguaya Jana Rodríguez Hertz da clases en la Universidad de Ciencia y Tecnología del Sur (SUSTech), en Shenzhen, desde diciembre de 2016 y se reconoce impresionada por la inversión que realiza China en tecnología y educación.

Sin embargo, la complementación con América Latina (AL) sigue siendo necesaria para ambas partes, dijo Rodríguez en entrevista con Xinhua.

COMPLEMENTACION

El sistema de enseñanza universitaria es muy similar en distintas partes del mundo.

"Es de los más rígidos del mundo porque en China, el MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts), en Uruguay o AL se enseña prácticamente de la misma manera", opina Rodríguez.

"La forma de dar clase está muy centrada en el docente", advierte la también vicepresidenta de la Organización para las Mujeres en Ciencia para el Mundo en Desarrollo para América Latina y el Caribe.

Rodríguez cree que los estudiantes chinos destacan por su capacidad de memorización y análisis.

"Tienen una gran memoria. Deben aprender miles de caracteres solamente para empezar a aprender lo básico, eso ya los desarrolla con una fuerte inclinación a la memorización", asegura.

Observa que "también tienen una gran capacidad analítica, superior a la de Uruguay. Pueden estar horas y a las horas encontrar un pequeño error en un pizarrón de cuentas".

Pero "solo los muy muy buenos alumnos tienen una capacidad creativa, el resto en ese plano están más rezagados", observó la investigadora en sistemas dinámicos y teoría ergódica.

Eso contrasta con AL donde "los estudiantes son más creativos pero al mismo tiempo tienen menos desarrollo de la memoria y desarrollo de la capacidad analítica", sostiene.

Rodríguez, de 48 años, cree que "probablemente los latinos han tenido que desenvolverse con pocos elementos", por lo que "improvisan con más facilidad y encuentran atajos creativos".

INVERSION

China "está preparándose para ser la primera potencia tecnológica y lo va a lograr", afirma la docente nacida en Rosario, Argentina, y residente de Uruguay desde 1994.

Realiza una gran inversión en ciencia y tecnología y da "grandes pasos" en inteligencia artificial, lo que contrasta con los países desarrollados que "están en retirada" en inversión en esa materia, refiere.

Según estima, "es una cuestión de tiempo".

El país asiático tiene una política que apunta a atraer recursos humanos extranjeros y repatriar profesores chinos que estén trabajando en el extranjero, como parte de una fuerte inversión en innovación, investigación y desarrollo, resalta Rodríguez.

Pero las diferencias en ese desarrollo entre China y América Latina son abismales.

"La producción de patentes en nuestra región está muy atrás de lo que son los países desarrollados, pero además la inversión en ciencia y tecnología de nuestros países es muy baja", advierte.

En ese sentido, lamenta que la inversión en esa materia de Uruguay se mantiene desde hace más de una década en un 0,3 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).

"Si queremos crecer tenemos que invertir aún más que ellos y estamos muy lejos, realmente muy lejos", reflexiona.

Recuerda que "la inversión no es todo" porque "hay que tener políticas, traer gente, hacer nuestros hábitats agradables para que la gente venga a instalarse por periodos grandes".

INTERCAMBIO

SUSTech, fundada en 2011, tiene una matrícula con mayoría de alumnos chinos, aunque se plantea como objetivo integrar extranjeros, comentó Rodríguez.

A nivel universitario no pesa la barrera cultural.

"Las aulas universitarias son muy parecidas en todo el mundo. A este nivel no encuentro barreras culturales", aseguró.

Rodríguez lamenta que en Uruguay tradicionalmente la sociedad le haya dado la espalda a las matemáticas, aunque los centros de investigación universitarios sean respetados a nivel continental.

"A la gente en Uruguay le da orgullo no entender matemática. A nadie le da orgullo no haber leído El Quijote (la célebre obra de la lengua española)", cuestionó.

"Eso no pasa en China",puntualiza, "cuando digo que soy docente de matemática siempre hay una expresión de mucho respeto. Es una disciplina que a la gente le gustaría dominar y le tienen mucho respeto".

No obstante, el país asiático debe avanzar en facilitar que venga gente del extranjero a investigar y a formarse, porque "está bueno dar un apoyo a lo local, pero la ciencia no funciona como los productos económicos, que uno puede hacer medidas proteccionistas".

La posibilidad de que estudiantes chinos incrementen su intercambio con las universidades latinoamericanas abre una ventana de optimismo.

"Enriquecería mucho a los dos sistemas", subraya.

En su disciplina, la matemática, "todavía no hay una ida y vuelta genuina" entre ambas partes, a excepción de lo que ocurre con Brasil, que tiene centros de muchísima importancia, estimó.

Para Rodríguez sin duda "hay un complemento" entre los estudiantes chinos y latinoamericanos.

"Funcionarían muy bien juntos", concluyó.  

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