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Nubes de partículas provenientes de accidentada superficie de asteroide Bennu podrían cambiar planes de NASA

Actualizado a las 20/03/2019 - 10:19
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WASHINGTON, 19 mar (Xinhua) -- Una observación cercana realizada por la nave espacial OSIRIS-REx del asteroide Bennu muestra nubes de partículas saliendo de su muy accidentada superficie, lo cual podría alterar en el transcurso del próximo año el vuelo de la nave espacial y sus planes para recoger muestras, indicaron el lunes científicos estadounidenses por videoconferencia.

La nave espacial OSIRIS-REx de la agencia espacial estadounidense, la NASA, se encontró a fines de diciembre de 2018 con el antiguo asteroide Bennu, cercano a la Tierra, y dio inicio a sus observaciones para encontrar un sitio para aterrizar, de manera que la nave pueda extender su brazo y tocar la superficie del asteroide para recolectar al menos 60 gramos de material suelto en 2020.

Previamente, el equipo de OSIRIS-REx esperaba una superficie en general lisa con unas cuantas rocas grandes en Bennu, pero resulta que toda la superficie de Bennu es accidentada y está llena de rocas.

La superficie accidentada significa que los planes de tocar la superficie y recoger muestras tienen que ser ajustados, dijo la NASA.

El plan original de la misión se basaba en un sitio de muestras libre de peligros con un radio de 25 metros, pero los científicos no pudieron encontrar un sitio de este tamaño en Bennu.

Además, la cámara de la nave descubrió nubes de partículas saliendo de la superficie del asteroide. Aunque muchas de las partículas fueron lanzadas lejos del asteroide, algunas orbitaron Bennu como satélites antes de regresar a su superficie, indicó la NASA.

Después de una evaluación de seguridad, el equipo de la misión concluyó que las partículas no constituían ningún riesgo para la nave espacial.

"Bennu nos ha planteado un desafío para abordar su accidentado terreno y confiamos en que OSIRIS-REx estará a la altura de la tarea", dijo Rich Burns, gerente del proyecto de OSIRIS-REx en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA.

"A lo largo de las operaciones de OSIRIS-REx cerca de Bennu, nuestra nave espacial y nuestro equipo de operaciones han demostrado que podemos lograr un desempeño en los sistemas que supere los requisitos del diseño", dijo Burns.

Las muestras de Bennu son científicamente significativas porque los asteroides primitivos como Bennu tienen el aspecto que la Tierra tenía cuando comenzó la vida, con moléculas orgánicas, volátiles y aminoácidos que podrían haber sido los precursores de la vida en la Tierra.

La observación de tres meses realizada por la nave espacial ya ha producido múltiples descubrimientos. Detectó la existencia de agua atrapada dentro de la arcilla, lo que indica que el agua líquida estuvo presente en algún momento en el cuerpo matriz de Bennu, un asteroide mucho más grande.

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