BEIJING, 23 sep (Xinhua) -- China se opone firmemente a que Estados Unidos fabrique mentiras, haga acusaciones infundadas y calumnie a China en el podio de las Naciones Unidas (ONU) con fines políticos, aseguró hoy miércoles el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Wang Wenbin.
"Los hechos han demostrado una vez más que el unilateralismo y las prácticas de intimidación son las amenazas más graves que enfrenta el mundo", expresó Wang durante una rueda de prensa en respuesta a las declaraciones del líder estadounidense sobre China el martes en el debate general de la 75ª sesión de la Asamblea General de la ONU.
"Las mentiras no pueden reemplazar de ninguna manera a la verdad. Los esfuerzos de respuesta de China ante la pandemia de COVID-19 están claramente registrados y las personas harán juicios justos", aseguró el vocero.
Al respecto, citó la oportuna información brindada por el país asiático sobre la situación de la COVID-19, su identificación del patógeno y el intercambio de la secuencia del genoma del virus.
Wang señaló que después de confirmar la transmisión de persona a persona del nuevo coronavirus, China cerró rápidamente el tráfico saliente de Wuhan. Asimismo, el país impuso las restricciones más estrictas al tráfico saliente desde otras zonas de la provincia de Hubei.
Además, rápidamente y de acuerdo con la ley, las autoridades aduaneras de China suspendieron los viajes al extranjero de ciudadanos chinos pertenecientes a cuatro grupos: los casos confirmados de COVID-19, los casos sospechosos, los contactos cercanos de pacientes confirmados y sospechosos de la enfermedad, así como personas con fiebre, detalló el vocero.
Wang recordó que en el momento en que se cerraron las vías de salida de la ciudad de Wuhan el 23 de enero, solo se habían identificado nueve casos confirmados fuera de China, de ellos solo uno en Estados Unidos.
Estados Unidos suspendió los vuelos directos hacia y desde China el 31 de enero. Cuando el país norteamericano cerró sus fronteras a todos los ciudadanos chinos el 2 de febrero, solo se habían reportado una docena de casos confirmados en Estados Unidos, detalló Wang.
"Los esfuerzos de respuesta de China ante la epidemia han sido abiertos y transparentes con una línea del tiempo clara. Los hechos y las cifras son un libro abierto que todos pueden ver", refirió.
Wang indicó que resulta "absolutamente inútil" que Estados Unidos haga acusaciones sin fundamento contra China en relación con la pandemia con el fin de desviar la culpa por su mal manejo del virus.
Los ataques arbitrarios de Estados Unidos y su retirada de la Organización Mundial de la Salud han puesto en peligro la cooperación global contra la epidemia, lo que dañará a personas de todo el mundo y hará que el pueblo estadounidense pague un alto costo, destacó el vocero.
"En lugar de buscar chivos expiatorios o difamar a otros, resulta imperativo que Estados Unidos detenga sus manipulaciones políticas y ponga fin a etiquetar o politizar el virus, y se una al resto de la comunidad internacional en esta lucha común", concluyó Wang.
(Web editor: 赵健, Rosa Liu)
