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Más que un final, un punto de partida

Pueblo en Línea  2020:11:09.16:43

Aldeano del condado de Fuping, provincia de Shaanxi, limpia los caquis que serán procesados como pasabocas secos. Esta industria ha aumentado los ingresos de la población local y ha ayudado a 2.400 hogares a superar la pobreza. (Foto: Tao Ming/ Xinhua)

Por Han Baoyi

Beijing, 09/11/2020 (El Pueblo en Línea) -Para el centenario de la fundación del Partido Comunista de China, efeméride a celebrarse el próximo año, China pretende haber eliminado la pobreza extrema y constituirse como una "sociedad moderadamente próspera".

"Esta es la transformación más increíble de una quinta parte de la gente de todo el planeta en 40 años", afirma Stephen Perry, presidente de The 48 Group Club en Gran Bretaña y colaborador para la erradicación de la pobreza en China.

"Este año es el año más difícil porque hay que superar las zonas más difíciles del problema, que precisamente se han quedado para el final", añadió.

Entre los indicativos para definir el resultado de la erradicación de la pobreza en China se incluyen disponer de ingresos anuales mínimos de 4.000 renminbi (600 dólares), acceso a los alimentos básicos y a ropa, educación obligatoria disponible para todos los niños, tratamiento médico básico disponible y condiciones de vida seguras, detalló la Oficina del Grupo Líder del Consejo de Estado para la Mitigación de la Pobreza.

A corto plazo, debido al COVID-19, el número de pobres en el mundo aumentará, pero "China va en sentido tras otro camino", asegura Perry.

Culminar la construcción de una "sociedad moderadamente próspera" el próximo año fue uno de los dos objetivos centenarios fijados por el Comité Central del Partido Comunista de China en el XVIII Congreso Nacional del 2012. En este sentido, eliminar la pobreza extrema es clave para lograrlo.

Pabellón de Shanxi en una exposición de productos agrícolas cultivados en zonas empobrecidas de China, Beijing, octubre del 2020. (Foto: Wang Zhuangfei)

Dedicación y altruismo

Aunque el COVID-19 ha azotado la sociedad y la economía chinas, Perry considera que la memoria del sufrimiento pasado, la confianza en los cimientos de la nación y el espíritu de dedicación y altruismo motivan a los chinos a superar todos los desafíos, sin importar lo difícil que sea la situación.

"Hay que recordar que en pocos días China fue capaz de movilizar a 40.000 médicos y enfermeras de toda China para volar a Wuhan, incluso ante el grave riesgo para la propia vida del personal de la salud”.

"Vi entrevistas con muchos de ellos. Estaban tan emocionados de tener la oportunidad de estar en la primera línea. Estoy seguro de que regresaron agotados, pero emocionados al saber que habían sido capaces de contribuir".

En abril, el Banco Mundial precisó que China había sacado de la pobreza a 850 millones de personas, alrededor del 70 por ciento de los pobres del mundo, desde que comenzaron las reformas y la apertura a finales de la década de 1970.

"Ha sido algo increíble", recuerda Perry. "Me llevó mucho tiempo darme cuenta de que el núcleo de lo que China estaba haciendo en la reforma y la apertura era permitir que la nación pudiera alimentar a su pueblo".

Durante los últimos 70 años, China ha estado desarrollando que las fuerzas de producción satisfagan las necesidades del pueblo, que es la principal contradicción a nivel nacional.

A principios de la década de 1950, el padre de Perry, Jack Perry, fundador de London Export Corporation, llevó a 48 empresarios británicos a Beijing y ayudó a construir una de las primeras relaciones comerciales entre China y Occidente.

Zhang Hua (a la derecha) trabaja en una base de cría de ovejas en el distrito Yuyang, Yulin, provincia de Shaanxi, 30 de octubre del 2020. (Foto: Tao Ming/ Xinhua)

Rompiendo el hielo

Aquellos 48 empresarios fueron los precursores del 48 Group Club. El viaje se conoció como la Misión Rompehielos y los miembros del club fueron apodados como “los rompehielos”.

Perry evocó la experiencia de su familia con China. Para él, la fundación del PCCh fue una respuesta a los desafíos que enfrentaba el pueblo chino al tratar de ofrecer al país "algo de prosperidad y seguridad razonables".

"El PCCh sabía que su trabajo era trabajar para ofrecerle una vida mejor al pueblo chino. Sacar del campo a cientos de millones de personas y construir una economía de exportación fue el primer paso".

“China ha logrado todo lo que necesita para convertirse en una sociedad moderadamente próspera”, asegura Perry. “Esto significa que tiene una economía más fuerte, una nueva democracia en construcción, ciencia y educación más avanzadas, un mejor entorno, una cultura próspera, una mejor calidad de vida y una mayor armonía social”.

"Estas son las bases de la innovación que llevará a China a convertirse, bajo la guía del presidente Xi Jinping, en una economía socialista avanzada y una sociedad moderna con características chinas", agregó.

La mitigación de la pobreza siempre ha sido una preocupación del presidente Xi, quien también es secretario general del Comité Central del PCCh y presidente de la Comisión Militar Central.

Xi ha asegurado que "ninguna zona pobre o individuo pobre será dejado atrás".

"La relación del presidente Xi con el flagelo de la pobreza se remonta a cuando era joven", precisa Perry. "Xi vivió la pobreza en Shaanxi. A muchas personas esa experiencia los ha marcado”.

Perry considera que "los chinos tienen una maravillosa profundidad de civilización y capacidad para soportar condiciones dramáticamente difíciles. En esa circunstancia Xi encontró la base de quien es hoy".

Stephen Perry en una comuna de té en Hangzhou, provincia de Zhejiang, 1977. [Foto: proporcionada a China Daily]

Cuatro principios importantes

En su libro “Levantarse y salir de la pobreza”, el presidente Xi establece cuatro principios importantes: evitar una mentalidad de pobreza; adoptar medidas de desarrollo adecuadas a las condiciones locales; tener un liderazgo destacado y una sólida coordinación; y no desperdiciar recursos en proyectos grandilocuentes porque sean populistas.

Perry subrayó que estos principios fundamentales suenan muy sencillos y obvios, y "sólo un hombre que tiene mucha experiencia puede resumirlos de una manera tan concisa".

"Siempre pienso que es un hombre que nunca olvidó a las personas que son muy pobres", aseveró.

Alcanzar los dos objetivos centenarios es clave para lograr el sueño chino de revitalización nacional, que es la visión transformadora de Xi para China y un principio unificador general para el pueblo chino.

Además de lograr una sociedad moderadamente próspera, el otro objetivo del centenario es hacer de China un país socialista moderno que sea próspero, fuerte, democrático, culturalmente avanzado y armonioso para cuando la República Popular China celebre su centenario en el 2049.

“A largo plazo los desafíos para China provienen principalmente del exterior”, recalcó Perry. Y añadió que habrá transformaciones en la economía nacional y que el país alcanzará sus metas para el 2049. Sin embargo, hay aprensión sobre esto en el mundo exterior.

"La contradicción externa de un mundo occidental que teme el ascenso de China y la transformación del orden mundial y los países que piensan que estarán mejor asociados a China es el desafío al que China se enfrenta ahora”, explicó Perry.

"Ahí es donde creo que el riesgo es mayor”, añadió

En los últimos dos años, las disputas comerciales entre Estados Unidos y China han generado muchas incertidumbres para la economía mundial. En enero, los dos países firmaron un acuerdo económico y comercial de fase uno.

Gran activo

"Creo que hay un período durante el cual occidente tiene que aprender que China no los cambiará. Cuando lo hagan se darán cuenta de que China puede llegar a ser un gran activo".

Hasta este año, antes de que apareciera el COVID-19, China representaba alrededor del 30 por ciento del crecimiento económico mundial.

"La mayor parte del resto del crecimiento se ha reducido por la pandemia. Calculo que China (producirá) el 70 por ciento o el 80 por ciento del crecimiento mundial de este año", indicó Perry.

"La verdad es que el mundo necesita China. Ese será el único factor motivador para resolver los problemas de los próximos 10 o 15 años", agregó.

El notable logro de China podrá servir de guía para erradicar la pobreza en todo el mundo.

Ana Revenga, especialista principal del programa Global Economy and Development de Brookings Institution y ex economista jefe adjunta del Banco Mundial, precisó en una teleconferencia sobre el informe inaugural del Banco Mundial "Pobreza y Prosperidad Compartida 2016": "Si alguien podrá mostrarle al mundo cómo hacer esa última milla (de poner fin a la pobreza extrema), probablemente será China".

El presidente Xi ha afirmado que "salir de la pobreza no es un fin en sí mismo, sino el punto de partida para una nueva vida y una nueva búsqueda".

Además de reducir la pobreza, prevenir y controlar eficazmente los riesgos financieros, y proteger el medio ambiente son los otros dos desafíos que China debe manejar con éxito para lograr una sociedad moderadamente próspera.

"El sistema aplica su método científico y es muy eficaz", aseguró Perry, refiriéndose al socialismo con características chinas, que permite al país tomar decisiones de manera eficiente, organizarse eficazmente y movilizar recursos para compromisos importantes.

Perry recalcó que China enrumbó por el camino correcto para convertirse en el primer país en lograr su "propia forma de socialismo".

"Y en el lado externo, creo que el mundo reconoce que la filosofía del presidente Xi de crear una comunidad de futuro compartido para toda la humanidad es muy sensata", agregó.

Desde que Xi propuso en 2013 la visión de "una comunidad de futuro compartido para toda la humanidad", China ha trabajado por construir un nuevo tipo de relaciones internacionales.

La Iniciativa la Franja y la Ruta ha sido una plataforma para construir la comunidad y una nueva forma de mejorar la gobernanza mundial y aumentar la comprensión mutua y los beneficios mutuos entre las diferentes sociedades.

Stephen Perry es el actual presidente de 48 Group Club, una red empresarial independiente comprometida con la promoción de los vínculos comerciales y culturales entre Reino Unido y China y dedicada a que los británicos entiendan mejor a China.

"El mundo es un lugar mejor si trabajamos juntos, en lugar de competir entre nosotros", concluyó Perry. 

(Web editor: 周雨, 赵健)

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