Un trabajador médico inyecta la vacuna contra la COVID-19 a un anciano en el distrito Dongcheng de Beijing, capital de China, el 18 de abril de 2022. Foto: Xinhua
Al menos una docena de ciudades en China ajustaron y optimizaron aún más las medidas de control de epidemias durante el fin de semana, incluida la eliminación del requisito de pruebas masivas frecuentes de ácido nucleico y los resultados obligatorios de las pruebas COVID-19 para viajar en transporte público. Algunas ciudades como Zhuhai en el sur de China, y Chongqing, en el suroeste de China, instaron a los residentes locales a no hacerse pruebas de ácido nucleico a menos que sea necesario, mientras que otros lugares exploraron nuevas medidas, como permitir que algunas personas que dan positivo por COVID-19 se pongan en cuarentena en casa.
Esas medidas, consideradas movimientos simbólicos para aliviar la carga de la gestión comunitaria y aliviar los recursos de atención médica pública que ya están sobrecargados, no deben verse como una "flexibilización total" en la batalla contra COVID-19 de China o una "apertura repentina al flexibilizar todas las restricciones COVID-19", admitieron algunos expertos en salud pública el domingo. Tras la novena edición de los protocolos de control de COVID-19 de China y 20 medidas optimizadas para combatir el virus, China se enfrenta a una nueva situación ya que la cepa Omicron muestra una patogenicidad debilitada, lo que requiere que las autoridades ajusten su respuesta epidémica de una manera más científica, flexible y consistente, mientras se gana una oportunidad para abordar tareas urgentes, como aumentar las tasas de vacunación entre las personas mayores y mejorar la preparación médica para el manejo de casos graves, dijeron los expertos.
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo en una conferencia de prensa el viernes que "estamos mucho más cerca de poder decir que la fase de emergencia de la pandemia ha terminado, pero aún no hemos llegado allí", según a los informes de los medios. Advirtió que las brechas en la vigilancia, las pruebas, la secuenciación y la vacunación continúan creando las condiciones perfectas para que surja una nueva variante de preocupación que podría causar una mortalidad significativa.
"No tomo el ajuste actual como un movimiento de flexibilización total' ni una apertura completa, pero hemos optimizado nuestras medidas de control de la epidemia de acuerdo con las características de la variante del virus, alcanzando un nuevo equilibrio entre el control de la epidemia y las actividades sociales y económicas", admitió el domingo Wang Guangfa, experto en respiración del Primer Hospital de la Universidad de Pekín, quien también fue uno de los expertos de la Comisión Nacional de Salud que visitó Wuhan en enero de 2020.
Para contener un virus tan altamente contagioso pero con una virulencia más débil, el costo de las medidas de control epidémico es mucho mayor que el de las medidas anteriores para tratar cepas con mayor virulencia como la variante Delta, lo que hace que el ajuste actual sea muy necesario, dijo Wang. "Pero es poco probable que salgamos de la pandemia en poco tiempo durante este invierno, ya que muchos países se enfrentan a rebrotes similares".
La OMS advirtió recientemente que la temporada de gripe 2022-2023 ha comenzado temprano en los países europeos y que COVID-19 sigue siendo una amenaza. Los casos en EE.UU. están aumentando nuevamente a medida que se propagan nuevas variantes de Omicron, informaron los medios estadounidenses durante el fin de semana. China reportó más de 30.000 casos el sábado, incluidas 4.168 infecciones domésticas y 27.433 casos asintóticos a medida que el número de casos diarios alcanza niveles casi históricos.
Optimización adicional
Shanghai anunció el domingo que eliminará la necesidad de un resultado negativo de ácido nucleico para viajar en transporte público y para algunos lugares al aire libre a partir del lunes, la última gran ciudad china en optimizar aún más las medidas de control de la epidemia.
Shenzhen, que se conoce como el Silicon Valley de China, emitió un comunicado el sábado por la mañana, confirmando que los residentes ya no necesitarán proporcionar un certificado de prueba de ácido nucleico al ingresar a lugares públicos como farmacias, parques y atracciones turísticas al aire libre, así como tomar público transporte, pero aún necesitarán escanear un código de lugar para registrarse en aeropuertos o estaciones de tren, y mostrar su código de salud verde.
Se instó a los residentes de Chongqing, una de las ciudades más afectadas por el brote actual de Omicron, a no hacerse pruebas de ácido nucleico a menos que sea necesario y en ciudades como Zhuhai en Guangdong, las autoridades locales dejaron de proporcionar pruebas de ácido nucleico gratuitas a partir del domingo. Una prueba PCR costará 2,6 yuanes (0,36 dólares) por persona para una muestra combinada y 13 yuanes para pruebas individuales.
Urumqi, capital de la región autónoma Uygur de Xinjiang, noroeste de China, intensificará los esfuerzos para impulsar la reanudación del trabajo, la producción y las actividades comerciales, dijeron funcionarios el domingo. A partir del domingo reanudarán sus operaciones los centros comerciales y los centros de esquí de la ciudad.
Varios distritos de Beijing han anunciado que las personas que se quedan en casa y no necesitan ir a lugares públicos ahora pueden optar por no hacerse las pruebas diarias de ácido nucleico, un enfoque diseñado para lograr una forma más precisa de reducir el riesgo y conservar los recursos. La capital también anunció el viernes que las pruebas de ácido nucleico válidas de 48 horas ya no serán necesarias en los autobuses y el metro a partir del lunes.
El proceso de apertura y salida de la pandemia debe avanzar paso a paso, y China se enfrenta ahora a las tareas más urgentes, como aumentar las tasas de vacunación entre las personas mayores y preparar más recursos médicos para tratar un posible aumento de casos graves, explicó Chen Xi, profesor asistente de salud pública en la Universidad de Yale, el domingo.
"La parte continental de China podría tomar a Singapur como ejemplo. Singapur, con recursos médicos limitados, permite que más pacientes con síntomas leves o sin síntomas se queden en casa para aliviar la presión de los recursos hospitalarios ya agotados y distribuir esos recursos a los más necesitados", Chen dijo.
Ciudades como Guangzhou y Beijing han comenzado a permitir que los contactos cercanos o algunos que dan positivo se sometan a cuarentena domiciliaria si se cumplen ciertos requisitos. Por lo general, los contactos cercanos se colocarán en principio en cuarentena centralizada, lo que también pesa mucho en la disposición de las instalaciones públicas.
Al igual que en Hong Kong, donde las autoridades locales han pedido aumentar la vacunación entre las personas mayores, la parte continental de China ahora debería priorizar la vacunación entre los mayores de 80 años y luego entre los 60 y 79, especialmente la vacuna de refuerzo, ya que esas personas son grupos de alto riesgo, señaló Chen.
Para salir de la epidemia, es crucial generar inmunidad entre los grupos vulnerables y el trabajo futuro no se centrará en eliminar completamente el virus a través de pruebas de ácido nucleico, sino que debe centrarse en mantener la virulencia del virus en un nivel muy bajo, indicó Zhang Wenhong, un prominente epidemiólogo radicado en Shanghai, en un foro público el sábado.
Zhang también pidió la vacunación heteróloga, mezclando diferentes tipos de vacunas para optimizar la inmunidad, al inocular la tercera dosis y lanzar una campaña para una cuarta dosis pronto, según informes de prensa.
Los funcionarios de salud chinos han vuelto a pedir a los ancianos que se vacunen, reiterando el alto riesgo de desarrollar un síndrome grave después de la infección, ya que el Mecanismo Conjunto de Prevención y Control del Consejo de Estado emitió una nueva guía para la vacunación de los ancianos.
"Ahora estamos cambiando nuestra estrategia de prevenir el virus a prevenir casos graves y muertes, por lo que debemos centrarnos mucho más en la población vulnerable clave", dijo Wang.
(Web editor: Rosa Liu, Zhao Jian)
