Un equipo de científicos internacionales analizó 200.000 imágenes del telescopio espacial Hubble y, tras realizar miles de mediciones en un proyecto de la NASA llamado SKYSURF, confirmó que el exceso de luz que rodea nuestro sistema solar es real. Aunque no hay mucha luz extra, y es solo un brillo sutil y fantasmal, este ligero exceso no se corresponde con lo esperado del censo de todos los objetos emisores de luz en nuestro entorno, destaca RT.
Ni la luz de las estrellas y las galaxias que rodean el sistema solar, ni la 'luz zodiacal', también conocida como polvo en el plano del sistema solar, puede explicar el brillo de fondo residual en nuestro sistema solar, lo que los astrónomos ahora llaman 'luz fantasma'.
Cuando los investigadores completaron este inventario de fuentes de luz de los archivos del Hubble, encontraron un exceso de luz extremadamente pequeño, equivalente al brillo constante de 10 luciérnagas repartidas por todo el cielo. Eso es como apagar todas las luces en una habitación cerrada y aun así encontrar un brillo espeluznante proveniente de las paredes, el techo y el piso. Puede que esto no parezca mucho, pero es suficiente para entender que algo falta, comentaron los científicos.
Algunas hipótesis explican el fenómeno, pero no se ha podido demostrar ninguna. Los científicos sugieren que pequeñas partículas de polvo y hielo de una población de cometas que viajan hacia el sistema solar interior, desde los bordes oscuros del sistema solar reflejando la luz del sol y creando un resplandor global difuso, puede ser la causa de esta anomalía. El problema radica en que aún no se ha detectado directamente. Si es real, esta capa de polvo podría ser una nueva adición a la arquitectura conocida del sistema solar.
(Web editor: 周雨, Zhao Jian)