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China dice «no» al Comunicado de Líderes de la Cumbre de Hiroshima del G7
(Foto de VCG)
Por Yao Fei
El 20 de mayo, la Cumbre de Hiroshima del G7 emitió un Comunicado de líderes en la que expuso los principios y valores, la visión general y las prioridades del grupo.
En cuanto a China, el Comunicado enfatizó la importancia de la cooperación con China y reafirmó que el G7 no buscaba «desvincularse» económicamente de China, mientras continuaba sus ataques calumniosos contra China sobre temas como el Mar de China Oriental, el Mar de China Meridional, el Estrecho de Taiwán y los derechos humanos, y afirmó que China debería instar a Rusia a «parar su invasión militar contra Ucrania».
A pesar de las serias preocupaciones de China, el G7 insiste en manipular temas relacionados con China, desacreditar y atacar a China e interferir groseramente en los asuntos internos de China, por lo cual China ha expresado su fuerte insatisfacción y firme oposición. Un Viceministro de Relaciones Exteriores de China convocó al embajador japonés para presentar gestiones solemnes.
¿Por qué China se siente molesta con el Comunicado de Líderes del G7? Analicemos punto por punto.
1. El G7 cree que para garantizar la resiliencia económica, es necesario «eliminar riesgos» y diversificarse, reducir la dependencia excesiva y mejorar la capacidad de resistir la «coerción económica» de China. Hablando de la «coerción económica», Estados Unidos es sin duda el «campeón del mundo». Ese país ha generalizado repetidamente el concepto de seguridad nacional, ha abusado de las medidas de control de las exportaciones y ha adoptado prácticas discriminatorias e injustas contra las empresas de otros países, lo que viola gravemente los principios de la economía de mercado y la competencia leal. La propia China es víctima de la coerción económica de Estados Unidos y siempre se ha opuesto firmemente a la coerción económica de otros países y al «desacoplamiento y ruptura de cadenas». China pide a Estados Unidos que deje de practicar el acoso unilateral, deje de coaccionar a sus aliados para que se dediquen a círculos exclusivos y deje de perturbar la seguridad y la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro mundiales.
2. El G7 reafirmó que la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán son indispensables para la seguridad y la prosperidad de la comunidad internacional y pidió una solución pacífica de los problemas a través del estrecho. El G7 debe tener claro que solo hay una China en el mundo y que Taiwán ha sido una parte inseparable del territorio chino desde la antigüedad. El principio de una sola China es la base política para que China establezca y desarrolle relaciones con otros países, y también es una parte importante del orden internacional después de la segunda guerra mundial, y es el consenso general de la comunidad internacional y una de las normas básicas de las relaciones internacionales. En la actualidad, la mayor amenaza para la paz en el Estrecho de Taiwán son los actos separatistas que buscan la «independencia de Taiwán» y el apoyo de las fuerzas externas. Para mantener verdaderamente la paz en el Estrecho de Taiwán, debemos oponernos claramente y detener cualquier acto independentista de Taiwán y nadie puede utilizar la Cumbre del G7 y ocasiones similares para apoyar y animar a las fuerzas separatistas de Taiwán. La cuestión de Taiwán es puramente un asunto interno de China y es el núcleo de los intereses centrales de China. Resolver la cuestión de Taiwán es un asunto propio de los chinos y nunca se permitirá la intervención de las fuerzas externas.
3. El G7 mantiene serias preocupaciones sobre la situación en el Mar de China Oriental y el Mar de China Meridional y se opone a los cambios unilaterales en el statu quo por la fuerza o la coacción. De ehcho, las «preocupaciones» del G7 son innecesarias. China es un firme defensor y constructor del derecho marítimo internacional. En la actualidad, la situación en el Mar de China Oriental y el Mar de China Meridional se mantiene estable en general. Los países pertinentes deben respetar seriamente los esfuerzos de los países de la región para mantener la paz y la estabilidad y dejar de utilizar cuestiones relacionadas con el mar para sembrar la discordia en las relaciones entre los países de la región y crear enfrentamientos de bloques.
4. El G7 expresó su preocupación por la situación de los derechos humanos en China, incluido el «trabajo forzoso» en el Tíbet y Xinjiang. Exhortó a China a que cumpla los compromisos contraídos en la Declaración Conjunta sino – británica y la Ley básica y mantenga los derechos, las libertades y el alto grado de autonomía de Hong Kong. El G7 debe ver que desde el regreso de Hong Kong, el Gobierno chino siempre ha implementado de manera integral, precisa e inquebrantable los principios de «un país, dos sistemas», «el pueblo de Hong Kong gobierna Hong Kong» y un alto grado de autonomía. Los residentes de Hong Kong disfrutan de diversos derechos y libertades de acuerdo con la ley. Hong Kong se está moviendo hacia una nueva etapa de gobernación y prosperidad. Xinjiang se encuentra en el mejor período de desarrollo en la historia, con estabilidad social, desarrollo económico, unidad étnica y armonía religiosa, y la máxima protección de los derechos humanos. El Tíbet ha cumplido la construcción de una sociedad acomodada de una manera integral según lo programado, y la libertad de creencias religiosas y la cultura propia de las personas de todos los grupos étnicos han sido plenamente protegidas y desarrolladas, lo que se ha convertido en una vívida representación del progreso de la causa de la democracia y los derechos humanos en China. Los asuntos de Hong Kong, Xinjiang y Tíbet son puramente asuntos internos de China, y ningún país extranjero tiene derecho a interferir.
5. El G7 pidió a China que instara a Rusia a «detener la agresión militar contra Ucrania». China ha enfatizado repetidamente que no es el fabricante ni la parte involucrada en la crisis ucraniana. Como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y potencia responsable, China no observa la crisis con los brazos cruzados, ni echa leña al fuego para avivarlo, y mucho menos aprovecha la oportunidad para sacar beneficios propios en la crisis ucraniana. China apuesta en la paz, el diálogo y el enfriamiento de la situación. Hace pocos días, China envió su representante especial del gobierno para asuntos euroasiáticos a Ucrania y otros países para mantener una comunicación en profundidad con todas las partes sobre una solución política a la crisis ucraniana. La dilación de la crisis ucraniana no da beneficio a nadie, y un alto el fuego lo antes posible para detener la guerra redundará en interés de todas las partes interesadas y del mundo entero. Una solución política es la única salida correcta.
Hace tiempo que el G7 debería haber cambiado sus hábitos hegemónicos. Debe abandonar lo antes posible la mentalidad de la guerra fría y los prejuicios ideológicos, dejar de interferir groseramente en los asuntos internos de otros países, dejar de formar «pequeños círculos» de confrontación de campo, dejar de crear artificialmente antagonismos y divisiones en la comunidad internacional. Debe responder y resolver con una actitud responsable las preocupaciones de la comunidad internacional y hacer algo práctico y positivo para la paz, la estabilidad y el desarrollo mundiales.
Yao Fei, diplomático chino y observador de temas internacionales