Entusiasmo deportivo cruza "distancia más larga" entre China y Argentina

Las chicas del equipo argentino de baloncesto femenino no pudieron ocultar su nerviosismo al pisar la cancha para el primer juego de la Universidada de Chengdu, se tomaron de las manos y se animaron mutuamente.

Al comienzo del juego se escuchó una ola de "¡Argentina! ¡Xiong qi (Vamos, chino en español)! Incluso con la barrera del idioma, la capitana Candela Gentinetta podía sentir el entusiasmo de los fanáticos chinos.

Aunque fue solo un partido preliminar y no participaron equipos chinos, el estadio tuvo una alta asistencia ese día. "No esperábamos que vinieran tantos espectadores, y cada vez que marcamos una canasta escuchamos aplausos y vítores, lo que nos hizo sentir cerca de casa", dijo Gentinetta.

Argentina es uno de los países más distantes de China. Los 54 atletas universitarios de la delegación del país suramericano tuvieron que volar al menos 30 horas para llegar a Chengdu, en la provincia suroccidental china de Sichuan.

Después del largo viaje, Gentinetta recordó haber encontrado cómodos dormitorios, hermosos gimnasios, una organización ordenada de los eventos y voluntarios entusiastas.

"Las infraestructuras son de primer nivel. Estamos agradecidos por las preparaciones que Chengdu ha hecho para garantizar la vida y las competiciones para los atletas", dijo la capitana.

Tras compartir en la Villa de la Universiada con atletas de las delegaciones de todo el mundo, la jugadora argentina de baloncesto femenino Milagros Maza señaló que resulta una experiencia muy buena tanto deportiva como culturalmente.

"¡Nihao (la frase en chino para decir "hola")! En una fiesta de atletas de la Universiada, el jugador de baloncesto masculino argentino Manuel Lambrisca y sus compañeros de equipo saludaron a los atletas chinos y de otros países con el saludo en mandarín recién aprendido.

Lambrisca y sus compañeras de equipo visitan China por primera vez y sus objetivos en la Universiada incluyen subir al podio y ver pandas. "Cuando terminemos las competiciones, iremos a visitar los pandas", refirió.

"Fue increíble y de una precisión inigualable". Después de ver la ceremonia de apertura de la Universiada, Julián Pérez, un diplomático argentino en China, enfatizó que la Universiada de Chengdu muestra el ejemplo del camino a seguir para lograr la paz duradera y la fraternidad entre nuestros pueblos.

"Tengo una hermosa y cálida impresión de Chengdu, de su ciudad, de su gente y de la alegría y esmero con la cual han desarrollado esta urbe. Realmente en este breve período pude disfrutar de una introducción a la rica cultura y experiencias que pueden vivirse aquí", reveló el diplomático argentino.