- Más
¿Cómo las tecnologías chinas de energía limpia están cambiando el mundo?
Planta de energía eólica en Zhangjiakou, provincia de Hebei. [Foto: Xinhua]
Por Zheng Xin
Puede que no muchos lo sepan, pero las compañías energéticas chinas, armadas con una experiencia incomparable en tecnologías y equipos sofisticados, en los últimos años han estado expandiendo su presencia verde en el escenario global.
Su impacto abarca desde los proyectos de transmisión de energía de Belo Monte, el primer "expreso de energía" en América del Sur que ha resuelto la escasez de energía local, construido por State Grid Corp de China, hasta la planta de energía nuclear de Karachi en Pakistán, que utiliza Hualong One, la tecnología de energía nuclear de tercera generación de China con todos los derechos de propiedad intelectual.
Desde que China dejó en 2021 de construir proyectos de energía en el extranjero usando carbón, la tendencia verde se ha acelerado, con las principales compañías eléctricas del país haciendo ajustes activos, cambiando su enfoque a las inversiones verdes.
Muchas compañías nacionales de energía se están enfocando a nivel mundial cada vez más en proyectos de energía renovable como la energía solar y eólica. El número de nuevos proyectos de energía invertidos el año pasado por las compañías eléctricas chinas aumentó casi un 56 por ciento interanual, cubriendo regiones como el sudeste asiático, Europa, Oceanía y América Latina.
La Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI) ha estado desempeñando un papel importante en el impulso de la tendencia verde de las compañías eléctricas chinas en el mercado global.
La conclusión es compartida por el Instituto de Planificación e Ingeniería de Energía Eléctrica de China, que asegura que la cooperación energética representa alrededor del 40 por ciento de la inversión total en los países y regiones que participan en el BRI, mientras que el propio sector eléctrico representa la mitad de la inversión en energía.
Este escenario no sólo ha promovido el intercambio y la distribución de recursos energéticos limpios, sino que también ha apoyado el desarrollo y la utilización de la energía renovable a escala regional.
Tal como yo lo veo, las empresas chinas ya están desempeñando un papel clave, inyectando un fuerte impulso al desarrollo económico y socialmente sostenible en las localidades. Sin embargo, todavía se encuentran en los segmentos medio e inferior de la cadena industrial internacional, con un beneficio general del proyecto que suele ser relativamente bajo.
Los complejos y lentos procesos de aprobación, junto con los modelos de financiación de las instituciones financieras, que carecen de flexibilidad y, por lo tanto, dan lugar a costos de financiación y burocracia relativamente altos, no son adecuados para el entorno de mercado altamente competitivo, lo que genera una brecha entre sus prácticas y las de sus homólogos internacionales en la industria.
A medida que los países de todo el mundo aceleran su transición a la energía verde e intensifican los esfuerzos para garantizar la seguridad energética nacional y ampliar su escala de inversión en energía, es necesario que China optimice aún más su política, mejore la competitividad internacional, ajuste y mejore el sistema de apoyo financiero, creando un modelo de apoyo financiero diversificado.
Para aprovechar mejor las ventajas integrales del país en tecnología, capital, talento y equipo, algunas de las empresas estatales y privadas ya están fortaleciendo la cooperación en innovación de tecnología energética y transferencia de resultados.
Este hecho facilitará aún más la reducción global de carbono al tiempo que consolidará la posición de China como líder mundial en el sector de las energías renovables.