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Una América Latina sin Doctrina Monroe es una América de todos
Imagen de archivo del 13 de febrero de 2020 del Capitolio y una señal de "alto" en Washington D.C., Estados Unidos. (Xinhua/Liu Jie)
Por Zhong Sheng, Diario del Pueblo
Recientemente, el gobierno de Estados Unidos desclasificó dos documentos a solicitud de Chile. Estos dos documentos, así como los documentos previamente desclasificados publicados por Estados Unidos, prueban de manera irrefutable que Estados Unidos fue el cerebro detrás del golpe de Estado chileno hace 50 años. Esto demuestra una vez más que Estados Unidos ha considerado durante mucho tiempo a América Latina como su "patio trasero" y ha ejercido su "hegemonía" en "nombre de las Américas" interviniendo arbitrariamente militar y económicamente en países latinoamericanos, y causando graves desastres a los pueblos de países latinoamericanos.
Los dos documentos recientemente desclasificados en Estados Unidos son informes presidenciales diarios preparados por la CIA. Los documentos muestran que el gobierno de Estados Unidos no sólo tenía información anticipada sobre el golpe militar lanzado por el comandante del ejército chileno Pinochet en septiembre de 1973, sino que también brindó apoyo al golpe militar. Documentos previamente desclasificados del Archivo de Seguridad Nacional de Estados Unidos también muestran que Estados Unidos consideraba al entonces presidente chileno Allende una amenaza y utilizó medios diplomáticos, políticos, económicos y de otro tipo para obstruir su régimen.
Han pasado cincuenta años y las cicatrices que dejó el golpe en la sociedad chilena aún no han sanado. Cuando el presidente chileno Gabriel Boric asistió a un evento para conmemorar a las víctimas del golpe en la capital Santiago hace unos días, dijo que la dolorosa experiencia del Golpe de Estado y la dictadura marcaron profundamente a generaciones de chilenos y chilenas. Pero hasta ahora el gobierno de Estados Unidos no ha mostrado ningún remordimiento, y mucho menos una disculpa. El Departamento de Estado de Estados Unidos incluso afirmó audazmente en una declaración emitida recientemente que la desclasificación de documentos "es consistente con nuestros esfuerzos conjuntos para promover la democracia y los derechos humanos en nuestros respectivos países y en todo el mundo".
¿Cómo promueve Estados Unidos “la democracia y los derechos humanos” en América Latina? En 1823, Estados Unidos emitió la "Doctrina Monroe", afirmando que "el continente americano es la América de los americanos". De hecho, consideraba a América como el "patio trasero" exclusivo de los estadounidenses. El presidente estadounidense Theodore Roosevelt declaró públicamente una vez: "Para aplicar la 'Doctrina Monroe', Estados Unidos tiene que ejercer el poder de policía internacional". En los 200 años transcurridos desde que se propuso la "Doctrina Monroe", Estados Unidos ha utilizado diversos medios para apoderarse de los recursos naturales latinoamericanos y destruir la economía de los países latinoamericanos e interferir en los asuntos internos de los países latinoamericanos, lo que ha llevado a una recesión económica, malestar social y una creciente desigualdad en los países latinoamericanos. Un estudio de la Universidad de Harvard muestra que en menos de 100 años, entre 1898 y 1994, el gobierno estadounidense planificó e implementó al menos 41 golpes de estado en América Latina, lo que equivale a uno cada 28 meses. Hasta el día de hoy, el legado de la "Doctrina Monroe" permanece. Estados Unidos frecuentemente impone sanciones y represión a países latinoamericanos "desobedientes". También intenta utilizar a los países latinoamericanos como peones en el conflicto entre bandos y obligarlos a elegir bando. Gabriel Merino, profesor de la UNLP(Universidad Nacional de La Plata en Argentina), señaló que América Latina y el Caribe se han visto profundamente perjudicadas por la hegemonía estadounidense.
El disfraz de Estados Unidos de "promover la democracia y los derechos humanos" no puede encubrir el daño causado por la "Doctrina Monroe" a los países latinoamericanos. La hegemonía estadounidense ha atraído cada vez más resistencia de los países latinoamericanos. En la novena Cumbre de las Américas organizada por Estados Unidos el año pasado, Estados Unidos intentó utilizar su ventaja como país anfitrión para remodelar su posición de liderazgo en las Américas. Sin embargo, la cumbre fue boicoteada abiertamente por líderes de muchos países latinoamericanos porque Estados Unidos se negó a invitar a los líderes de Cuba, Venezuela y Nicaragua a asistir a la cumbre. Un comentario en el sitio web estadounidense "Foreign Policy" señaló que una característica importante de Estados Unidos cuando se discuten temas latinoamericanos es la "arrogancia ignorante". El presidente mexicano López Obrador recalcó que “ya no es el tiempo de la política de América para los americanos, de la Doctrina Monroe, no”, y que “se tiene que respetar la libertad, la independencia de los países”.
En la actualidad, como conjunto de países de mercados emergentes y países en vías de desarrollo, el "Sur Global" tiene una voz e influencia cada vez mayores en los asuntos internacionales, y los países latinoamericanos también están dando constantemente nuevos pasos para unirse y fortalecerse. Estados Unidos debe reconocer la tendencia general de los tiempos, respetar seriamente la soberanía y los derechos de los pueblos de los países latinoamericanos y acatar seriamente las normas básicas de las relaciones internacionales. Sólo así será posible establecer relaciones normales con los países de América Latina.
(Zhong Sheng es un seudónimo que suele utilizar el Diario del Pueblo para expresar sus puntos de vista sobre política exterior y asuntos internacionales).