Las Zonas de Libre Comercio marcan un hito en el desarrollo de China en el siglo XXI

Vista aérea del 6 de enero de 2022 de un parque científico en construcción, donde se llevó a cabo una ceremonia que anuncia el inicio de la construcción de proyectos en el puerto de libre comercio de Hainan, en la Bahía de Yazhou de Sanya, en la provincia de Hainan, en el sur de China. (Xinhua/Yang Guanyu)

Por Cristóbal Chávez Bravo

El establecimiento de Zonas de Libre Comercio (ZLC) en China es un hito de la política comercial y de desarrollo del país asiático en el siglo XXI, afirmó la experta chilena Karina Piña con motivo del 10º aniversario de la instauración de esta política.

La profesora de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad de Talca explicó en una entrevista con Xinhua que estas zonas son una política de desarrollo económico y modernización que buscan sacar partido de la inversión extranjera como vehículo para potenciar sectores prioritarios para cada territorio en que se implementan.

"Este tipo de medida puede tener un gran impacto al permitir la entrada de grupos de inversionistas que de otro modo podrían considerar las restricciones como demasiado grandes. En ese sentido, corresponden a una reducción significativa del riesgo de inversión en las zonas y los sectores enfocados", aclaró.

Subrayó que las ZLC pueden identificar un gran enfoque en innovación y tecnologías de punta, como la inteligencia artificial o tecnologías verdes, lo que "trae grandes oportunidades para países con desarrollo en dichos sectores".

La también directora ejecutiva de Cruzando el Pacífico, corporación que fomenta el intercambio académico, educativo y cultural entre China y América Latina, precisó que estudios han demostrado que las ZLC han contribuido a mejorar los niveles de capital humano en regiones de China.

"Este avance se traduce en una fuerza laboral más capacitada y productiva, lo que ha atraído inversiones y empresas extranjeras que buscan aprovechar este capital humano de alta calidad", afirmó la investigadora.

Piña agregó que la liberalización del comercio en estas zonas ha facilitado el flujo de bienes, capital y tecnología, lo que ha permitido estimular el crecimiento económico regional y ha aumentado la competitividad internacional de China.

"Cada ZLC en China se ha diseñado estratégicamente para aprovechar las ventajas específicas de su ubicación geográfica, lo que ha fortalecido la integración económica regional y ha mejorado la cooperación", profundizó la experta en China.

En consecuencia, abundó, las empresas extranjeras han encontrado un entorno más propicio para expandir sus operaciones en China gracias a estas zonas, lo que ha contribuido al "crecimiento económico a nivel mundial y ha fortalecido la posición de China en la economía global".

"Estas zonas representan una evolución importante en la estrategia económica de China y su compromiso con la apertura global", apuntó.

Piña hizo hincapié en que los cambios económicos y su impacto en las ZLC de China continuarán desarrollándose en los próximos años.

La investigadora destacó que, a diez años de la instauración de la ZLC de Shanghai, ya están presentes en la totalidad de la costa de China, donde están teniendo impactos significativos.

"Más que un piloto ya se puede considerar como un hito de la política comercial y de desarrollo de China en el Siglo XXI", apuntó.

"La principal interrogante continúa siendo si lograrán contribuir en grado suficiente a posicionar a China en las industrias de alta tecnología y tecnologías digitales, incluyendo sectores como inteligencia artificial, tecnologías verdes o computación cuántica, que han sido los sectores más fomentados en las ZLCs más recientemente instauradas", reflexionó la experta chilena.

Piña recalcó que, para Latinoamérica, en función al vínculo comercial de "muy alto impacto" con China, este tipo de políticas, que apuntan a cambios en la matriz económica del país, deben ser vistos con especial atención.

"Llevar las inversiones nacionales a focos de inversión global como las ZLCs es un desafío para Chile. Si bien fue el primer país en Latinoamérica en firmar un Tratado de Libre Comercio con China en 2005 y la versión actual del mismo, modernizado en 2017, incluye un capítulo de inversiones, se hace cada vez más necesaria una política de Estado para gestionar las relaciones económicas", profundizó.

En esta línea, la investigadora del país sudamericano instó a avanzar en el camino de la cooperación cruzando el Pacífico, que requiere de la formación de un capital humano avanzando en ámbitos de inversiones y negocios que vaya de la mano con conocimientos de la cultura milenaria y el dominio de su idioma.

Desde 2013 a la fecha, China ha establecido 21 zonas piloto de libre comercio, además del puerto de libre comercio de Hainan.

Desde las zonas costeras hasta las regiones centrales del interior y las provincias fronterizas, las zonas de libre comercio se han convertido en pioneras en los esfuerzos de apertura y reforma de alto nivel del país, según información oficial.