La ausencia inesperada de Messi provoca indignación en Hong Kong

El Inter Miami fue abucheado fuera del campo y los fanáticos gritaban "reembolso" después de que Messi no saliera al campo como había prometido el organizador. Foto: VCG

La ausencia no anunciada de Lionel Messi en un partido amistoso entre la selección de fútbol de Hong Kong y su club Inter Miami el domingo provocó decepción y enfado entre los aficionados presentes en el estadio. Los funcionarios del gobierno de la región administrativa especial de Hong Kong (RAEHK) también exigieron una explicación.

El lunes por la noche, el organizador del partido, Tatler Asia, describió el incidente como un final decepcionante y expresó su pesar en nombre de los aficionados. Durante una conferencia de prensa, el organizador afirmó que su contrato con el Inter Miami estipulaba que Messi jugaría si no estaba lesionado. Al enterarse de que Messi no podría participar del partido, le solicitaron formas alternativas de interacción, pero sin éxito.

El organizador declaró que habían retirado su solicitud anterior de financiación del gobierno de Hong Kong. El Comité de Grandes Eventos Deportivos (MSEC) había concedido anteriormente al evento una subvención de 15 millones de dólares de Hong Kong (1,92 millones de dólares) y una subvención para la sede de 1 millón de dólares de Hong Kong.

Sin embargo, los organizadores no respondieron a la solicitud de reembolso de los aficionados.

La atmósfera en el partido del domingo estaba claramente dividida en tres etapas distintas, dijo el lunes un veterano periodista de fútbol que informó sobre el lugar. Desde antes del partido hasta aproximadamente el minuto 70, la afición se mostró entusiasmada, aplaudiendo constantemente a ambos equipos o coreando juntos el nombre de Messi. Pasado el minuto 70, la afición se dio cuenta de que Messi aún no había calentado y empezó a corear su nombre continuamente y a abuchearlo. Al final del partido, cuando todavía no había señales de que Messi saltaría al campo, la afición se enojó, abucheando continuamente y gritando "reembolso". Incluso durante la ceremonia de premiación y despedida posterior al partido, el enfado de los aficionados siguió siendo evidente.

Desde el pre-partido hasta el post-partido, ni los aficionados ni los medios fueron informados que Messi no jugaría, pero lo dedujeron de las acciones de Messi, quien permaneció vestido con ropa casual, dijo el periodista. Sólo durante la rueda de prensa posterior al partido el técnico dio una explicación.

La ira y la decepción provocadas por la ausencia no anunciada de la estrella de su campo continuaron aumentando después del partido. Después del partido, muchos aficionados se negaron durante mucho tiempo a abandonar las gradas y cuestionaron a los organizadores y al Inter Miami. Algunas vallas publicitarias de Messi ubicadas cerca del estadio y estaciones de metro fueron atacadas. Al mismo tiempo, varios funcionarios del gobierno de Hong Kong también expresaron su preocupación por el incidente.

"Creo que al menos entre el 80% y el 90% de los aficionados en el estadio vinieron a ver este partido gracias a Messi", dijo un aficionado de apellido Wang que viajó desde Guangdong para ver el partido. "Como aficionado, lo que más me enoja no es que Messi no pueda jugar, sino la sensación de haber sido engañado y faltado al respeto".

"Si el organizador me hubiera informado de antemano que Messi no podría participar, igualmente habría ido a ver este partido. Pero esta situación no se hizo pública en absoluto y los aficionados fueron engañados para que vinieran al estadio", dijo. "Sobre todo porque Messi ya había mostrado signos de malestar físico durante el entrenamiento abierto del día anterior".

Kevin Yeung Yun-hung, secretario de Cultura, Deportes y Turismo del gobierno de Hong Kong, dijo en una rueda de prensa el lunes que Messi fue contratado para jugar al menos 45 minutos. Habían solicitado medidas correctivas, que finalmente no tuvieron éxito, informó RTHK el lunes.

El funcionario del gobierno de Hong Kong dijo que el organizador había confirmado con ellos que Messi jugaría en la segunda parte, pero no apareció como había prometido. Hacia el final del partido, el organizador confirmó que Messi no podía jugar, dijo Yeung, según informes de los medios.

En un comunicado, el gobierno de Hong Kong dijo que está "extremadamente decepcionado" porque Messi no pudo jugar en el partido amistoso ni dar explicaciones a los aficionados en persona cuando lo solicitaron.

Kenneth Fok Kai-kong, miembro del Consejo Legislativo de Hong Kong, también expresó su gran decepción con los arreglos hechos por el organizador. Le dijo al Global Times el lunes que Tatler y el equipo internacional de Miami deben disculparse y explicar la situación a los aficionados locales.

Este veterano periodista de fútbol dijo que Inter Miami tiene una gran responsabilidad en este incidente, ya que programaron sus partidos de preparación de pretemporada demasiado cerca y en lugares distantes, lo que llevó al problema a estallar en Hong Kong.

El equipo jugó seis partidos del 20 de enero al 16 de febrero en El Salvador, Estados Unidos, Arabia Saudita, China y Japón, "claramente tratando a Messi como una fuente de ingresos", dijo.

En 12 días, el veterano de 37 años jugó cuatro partidos y viajó por medio mundo. Es difícil esperar que mantenga altos niveles de energía, afirmó.

Sin embargo, la propia reacción de Messi también ha causado una decepción generalizada, especialmente su negativa a interactuar o hablar con los aficionados en el lugar cuando no podía jugar.

Desde que China salió de las restricciones pandémicas hace un año, se han celebrado eventos comerciales de clubes extranjeros de alto perfil en varias ciudades, pero también han traído consigo una serie de problemas, especialmente en la venta de entradas. Por ejemplo, los precios de las entradas para el partido Inter Miami-Hong Kong oscilaron entre 880 dólares de Hong Kong (112 dólares) y 4.880 dólares de Hong Kong, superando con creces los precios de las entradas para los partidos de fútbol promedio. Los precios extremadamente altos de las entradas también han hecho que los aficionados se enojen más fácilmente, exigiendo que se garanticen los derechos prometidos.

Otra estrella del fútbol internacional, Cristiano Ronaldo, debía participar en dos partidos de preparación contra clubes chinos en Shenzhen los días 24 y 28 de enero. Sin embargo, debido a una lesión, no pudo jugar y los organizadores anunciaron el aplazamiento del partido el 23 de enero, un día antes del primer juego, prometiendo reembolsar completamente las entradas y reembolsar los gastos de viaje de los aficionados de fuera de la ciudad. Ronaldo también expresó sus disculpas a la afición.