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China recibe el Año del Dragón a la vanguardia de la investigación e innovación científicas
Foto: VCG |
Por Yasef Calderón
China recibe el Año del Dragón a la vanguardia de la investigación e innovación científicas. Durante el 2023, el gigante asiático se ubicó entre los líderes mundiales (en términos de cantidad y calidad) en investigación e innovación en los campos de la vida y la salud, los productos biofarmacéuticos, las nuevas energías, las tecnologías bajas en carbono, los nuevos materiales, la fabricación avanzada y las tecnologías de inteligencia digital, entre otros, precisó el Informe de Innovación del Foro de Boao para Asia.
El nuevo informe, que analiza las tendencias y los desafíos globales en materia de innovación tecnológica en 2023, con un enfoque particular en el desarrollo de tecnologías de vanguardia en todo el mundo, destaca que medidas como el aumento de la inversión gubernamental en investigación y desarrollo, la promoción de la transformación industrial de los logros científicos y tecnológicos, el fortalecimiento de la protección de la propiedad intelectual y la atracción de talento científico y tecnológico en innovación, han ayudado a mejorar el despliegue estratégico de la innovación tecnológica en todo el país.
Entre los importantes hitos anunciados en el corto recorrido del 2024, resalta el chip-implante cerebral que un equipo de ingenieros de la Universidad Tsinghua de Beijing han desarrollado para devolverle la movilidad a personas con discapacidad, logrando un progreso considerable dentro de este tipo de investigaciones. La prensa internacional resaltó que el implante chino, bautizado como Neural Electronic Opportunity (NEO), le permitió a un paciente tetrapléjico utilizar una prótesis de brazo controlada por su cerebro. El hombre había quedado paralizado hacía 14 años, debido a una lesión en la médula espinal.
Otro de los grandes acontecimientos dados a conocer es la clonación en China por primera vez de vacas tibetanas Zhangmu y Apeijiaza, que se encuentran en peligro de extinción. El equipo científico del Instituto de Cría de Animales y Medicina Veterinaria de la Academia China de Ciencias Agrícolas de Beijing, explicó que con la ayuda de tecnología de transferencia nuclear de células somáticas se prepararon embriones clonados, los cuales fueron implantados en el útero de vacas de gestación subrogada, obteniendo ocho terneros.
Dentro del campo de la comunicación y la informática, China acaba de dar a conocer la novedosa FlexRAM, primera memoria de acceso aleatorio (RAM) totalmente flexible. Inspirada en los mecanismos de polarización y despolarización del cerebro humano para llevar a cabo el proceso de escritura y lectura de datos. La FlexRAM puede ser capaz de almacenar un total de un byte de información, velocidad de almacenamiento rápida (33 hercios), capacidad de retención de datos prolongada (hasta 12 horas) y un rendimiento estable durante más de 3.500 ciclos de operación, que la hace factible para otras aplicaciones como robots inteligentes y sistemas de interface cerebro-máquina.
La Academia China de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo ha subrayado que la capacidad de innovación integral de China ha ascendido a la décima posición a nivel mundial, consolidando aún más su status como nación innovadora líder en ascenso.
Con el reciente lanzamiento del primer satélite dedicado a explorar la aplicación de tecnología de sexta generación (6G), China Mobile mantienen su indiscutible liderazgo dentro de la creación de plataformas para las futuras redes integradas espacio-terrestres. Como se ha indicado, este tipo de satélites puede evitar zonas de silencio dentro del plan de cobertura de redes móviles terrestres y ofrecer Internet satelital con un mayor ancho de banda.
De igual forma, la investigación e innovación científica en inteligencia artificial sigue generando gratas noticias. Este mes, un total de 14 nuevos grandes modelos de lenguaje (LLM, por sus siglas en inglés) recibieron aprobación oficial para su uso público. En este cuarto lote de autorizaciones concedidas por Beijing se benefician empresas como Xiaomi. En total, China ha aprobado más de 40 modelos de inteligencia artificial para uso público. El Ministerio de Industria y Tecnología de la Información ha informado que se mantienen operativas más de 4.400 empresas dedicadas al sector de la inteligencia artificial, valoradas en 69.600 millones de dólares.
En la búsqueda del objetivo de convertirse en una potencia tecnológica, voces expertas sugieren que China aumente aún más la inversión en recursos de innovación, profundice de manera integral las reformas en el sistema de ciencia y tecnología y optimice más aún el entorno de innovación y emprendimiento para el desarrollo de alta calidad del país. Según un informe publicado por la Cámara de Comercio de la Unión Europea en China y el Instituto Mercator de Estudios Chinos, con sede en Berlín, la abrumadora mayoría de las empresas europeas encuestadas han expresado planes para aumentar el gasto en investigación y desarrollo. Precisamente, Beijing como capital ha dado la bienvenida este año a empresas, instituciones y talentos extranjeros para que se unan a los grandes proyectos de investigación científica, ofreciendo mejores incentivos y servicios específicos. El nuevo reglamento, aprobado durante la segunda sesión de la XVI Asamblea Popular Municipal de Beijing, busca consolidar a la capital china como centro internacional de innovación científica y tecnológica. Entre las claves a implementar se alentará a las organizaciones nacionales de ciencia y tecnología a que admitan talento extranjero, pudiendo liderar grandes proyectos científicos o ser científicos jefes.
China continuará incentivando la optimización y actualización de la estructura industrial y la disposición prospectiva, así como el uso de tecnologías de vanguardia como la inteligencia artificial y los robots humanoides.
En el “Año del Dragón”, la máxima prioridad en la labor económica seguirá siendo contar con una innovación científica y técnica que permita liderar el desarrollo de un sistema industrial moderno, abriendo un espacio vital para rubros emergentes de importancia estratégica como la fabricación biológica, la industria espacial comercial y la economía de baja altitud, que a su vez, tienda puentes a los nuevos escenarios que augura la tecnología cuántica y las ciencias de la vida.