China emite primer veredicto legalmente vinculante sobre la infracción de derechos de autor en imágenes generadas por IA

Por Zhang Yuying

Un cuadro comparativo muestra Ultraman Tiga y capturas de pantalla de las principales imágenes relacionadas con el caso producidas por la empresa demandada. (Foto: 21st Century Business Herald)

China se pronunció sobre un caso de infracción de derechos de autor por parte de un servicio generado por inteligencia artificial (IA). Este es el primer fallo efectivo de este tipo a nivel mundial que proporciona una respuesta judicial al dilema sobre si el contenido generado por los proveedores de servicios de IA infringe los derechos de autor.

De acuerdo a la publicación 21st Century Business Herald, el Tribunal de Internet de Guangzhou dictaminó que en el proceso de prestación de servicios de IA generativa una empresa había infringido los derechos de autor y de adaptación del demandante sobre las obras de "Ultraman", y en consecuencia tiene que asumir la responsabilidad civil pertinente.

El protagonista de este caso fue el súper IP Ultraman. El titular de los derechos de autor de las obras de "Ultraman" autorizó exclusivamente los derechos de autor de las imágenes de la serie al demandante, mientras que la empresa demandada operaba un portal digital que ofrecía servicios con conversación y funciones gráficas generadas por IA.

El demandante descubrió que al solicitar al portal digital que generara imágenes relacionadas con Ultraman, las fotos generadas eran sustancialmente similares a la imagen de su propiedad. Además, la función gráfica era un servicio exclusivo para miembros, que requería pagar cuotas de membresía.

El demandante consideró que el demandado, sin autorización, utilizó ilegalmente derechos ajenos para entrenar su modelo y generar imágenes sustancialmente similares. Asimismo, a través de la venta de membresía y otros servicios de valor agregado estaba obtenido ganancias ilegales, sin pagar los correspondientes derecho de autor.

La sentencia demostró que las imágenes generadas por la empresa demandada, copiaban parcial o totalmente, la obra artística original. Por lo tanto, se copió la obra sin permiso, infringiendo los derechos de reproducción. Además, algunas de las imágenes generadas formaban nuevos elementos basados en la expresión original, infringiendo los derechos de adaptación.

Zhou Chengxiong, subdirector del Centro de Consulta e Investigación para Asuntos Estratégicos de la Academia China de Ciencias, manifestó al Global Times que la sentencia puede llevar a que algunas empresas chinas de IA a ser más cautos en inversión y desarrollo, debido a que podrían percibir que los riesgos legales son demasiado altos.

Zhou apuntó que, en medio de una feroz competencia internacional, es probable que la disminución del entusiasmo por la inversión obstaculice la innovación tecnológica, lo que podría ampliar la brecha entre China y otras potencias líderes en tecnología de IA.

La sentencia también especificó el deber de diligencia para los proveedores de servicios de IA generativa. Dado que los usuarios no son conscientes de los posibles riesgos de infracción de los derechos de autor, los proveedores deben alertarlo a través de sus acuerdos de servicio.

Los proveedores de servicios de IA también deben establecer un mecanismo de notificación de reclamaciones para facilitar la protección de los derechos de autor. Además, si el contenido generado por IA puede causar confusión o identificación errónea, los proveedores de servicios tienen el deber de etiquetar de manera destacada la naturaleza del contenido en una ubicación o área visible.

El Tribunal de Internet de Guangzhou enfatizó que, teniendo en cuenta el hecho de que la industria de la IA generativa aún se encuentra en sus primeras etapas de desarrollo, es necesario equilibrar entre la protección de los derechos y el avance de la industria. Es por ello por lo que no es apropiado sobrecargar excesivamente a los proveedores de servicios. Sin embargo, recalcó que tienen que cumplir activamente con un deber de cuidado razonable y asequible que contribuya al establecimiento de un sistema de gobernanza de la IA con características chinas que promueva de forma coherente la seguridad, el desarrollo, el equilibrio, la inclusión, la innovación y la protección de los derechos fundamentales de la propiedad intelectual.

El Tribunal de Internet de Guangzhou sentenció que el acusado debe compensar al demandante por pérdidas económicas equivalentes a 10.000 yuanes (1.389 dólares).

En noviembre de 2023, el Tribunal de Internet de Beijing dictaminó en una disputa de propiedad intelectual que una imagen generada por IA era una obra de arte protegida por la ley de derechos de autor. Ese fue el primer caso de este tipo resuelto en China.