La cooperación entre México y China en materia de nuevas energías impulsa el crecimiento del comercio y la transición verde

La vista de la Ciudad de México Foto: VCG

La cooperación económica y comercial entre México y China se ha ido ampliando desde proyectos de infraestructura e industrias tradicionales hasta florecientes sectores de nuevas energías, lo que representa un escenario en el que todos ganan para las relaciones bilaterales, dijo el ex embajador de México en China, José Luis Bernal, en una entrevista exclusiva este fin de semana.

"El potencial empresarial diversificado impulsará el crecimiento del comercio bilateral y contribuirá a la transición verde global", dijo Bernal al Global Times durante la octava Cumbre Global de Think Tanks, organizada por el Centro Chino para Intercambios Económicos Internacionales en Beijing el viernes.

Bernal destacó la alta complementariedad de las dos economías y señaló que las fortalezas tecnológicas y de capital de China, combinadas con las ventajas de México en ubicación, mercado y manufactura, ofrecen amplias oportunidades para la cooperación bilateral frente a la creciente incertidumbre global y las reubicaciones de las cadenas de suministro.

La fabricación de vehículos de nueva energía y la generación de energía verde, junto con la extracción y refinación de minerales, se encuentran entre los sectores más prometedores para la cooperación bilateral, señaló Bernal.

China y México han experimentado una rápida expansión del comercio y la inversión en los últimos años. Los datos de las aduanas chinas muestran que de enero a mayo de este año, el volumen del comercio bilateral alcanzó casi 10.000 millones de dólares, un aumento interanual del 10,6%.

Entre los aspectos más destacados, los fabricantes de automóviles chinos han experimentado un crecimiento sólido en los mercados latinoamericanos, incluido México, mediante la expansión de las ventas y el establecimiento de plantas de fabricación. Los observadores de la industria dijeron que la entrada de las marcas de automóviles chinas a México ha abierto un nuevo capítulo, pasando del comercio basado en pedidos a la integración localizada de la cadena de suministro industrial.

El fabricante chino de vehículos eléctricos (EV) BYD planea establecer una planta de fabricación en México, que se prevé creará alrededor de 10.000 puestos de trabajo. La compañía se encuentra actualmente en negociaciones avanzadas sobre el sitio de la instalación y se espera un anuncio oficial en los próximos meses, según informes de los medios.

"Dado el gran mercado interno de México y sus fuertes capacidades de producción de automóviles, muchos fabricantes de automóviles chinos ahora están vendiendo vehículos en México y mostrando un creciente interés en fabricar vehículos localmente", dijo Bernal. Señaló que el proyecto de la planta BYD en curso se dirigirá tanto al mercado local como a todo el mercado estadounidense, impulsando una cooperación industrial y de cadena de suministro beneficiosa para todos en la región.

La alta rentabilidad de los vehículos eléctricos chinos ha sido reconocida por los consumidores locales y les reporta beneficios, afirmó Bernal.

"Las inversiones chinas también tienen impactos positivos en el desarrollo local como la creación de empleo, la generación de ingresos, la absorción de tecnología y el aumento de las exportaciones de México a otros mercados", remarcó Bernal.

Jon Creyts, director ejecutivo del Rocky Mountain Institute, dijo durante la cumbre que China está a la vanguardia del avance de tecnologías verdes como la energía solar, la energía eólica y el almacenamiento de baterías. "China ha asumido una temprana posición de liderazgo, dando forma a la dinámica del mercado global, lo que estimula y fomenta numerosas innovaciones".

Bernal destacó que en México Huawei también juega un papel importante en infraestructura y telecomunicaciones, además de suministrar equipos a varias empresas mexicanas.

Además, Bernal abogó por una cooperación más profunda en las industrias de extracción y refinación de minerales, con la esperanza de que México lidere el desarrollo de capacidades de refinación de litio a través de colaboraciones con empresas chinas que poseen tecnologías de fabricación de paneles solares y turbinas eólicas.

"La cooperación México-China necesita evolucionar con nuevos enfoques y mecanismos, que el gobierno mexicano entrante, que se espera asuma en septiembre, está aplicando activamente a la luz de la competencia China-Estados Unidos y su impacto potencial en México", dijo Bernal.

Zhao Chenxin, subdirector de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, dijo durante la cumbre que "respetar las leyes de la economía de mercado y promover la liberalización y facilitación del comercio y la inversión son las claves para mejorar la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro globales y promover la estabilidad del crecimiento económico en todo el mundo".