Iniciativa sobre control de divisas en Bolivia desata rechazo y temor en sector privado

La propuesta del Gabinete Social Extraordinario de Bolivia para imponer un control estricto sobre las divisas provenientes de exportaciones bolivianas provocó hoy miércoles una ola de rechazo por parte de empresarios, exportadores y productores.

La propuesta del gabinete social incluye además medidas como el apoyo a la industria nacional y la promoción del ahorro en dólares.

Durante la reunión celebrada el martes entre representantes del Gobierno y más de 30 dirigentes de organizaciones sociales en la Casa Grande del Pueblo, sede del Ejecutivo, se debatió sobre la actual coyuntura económica, la escasez de diésel, el tipo de cambio del dólar y las dinámicas de exportación e importación.

El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Huarachi, destacó la necesidad de tomar medidas urgentes para enfrentar la crisis; sin embargo, la respuesta no se hizo esperar desde la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) y la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco).

En un comunicado, la CEPB señaló que estas medidas "causan más incertidumbre, zozobra y preocupación en los agentes económicos y agravan la ya delicada situación del país".

"Una medida como la planteada por la COB generaría la destrucción del aparato productivo y provocaría la debacle del sistema exportador", alertó la confederación.

A su vez, el presidente del IBCE, Alan Camhi, fue más allá al indicar que un control de divisas podría llevar a una crisis aún más profunda, con impactos devastadores en la economía, como el aumento del mercado negro de dólares, inflación, caída en la oferta de bienes extranjeros y un desmoronamiento en la confianza en la moneda nacional.

El presidente de la Cainco, Jean Pierre Antelo, también criticó la medida, calificándola de una "mala decisión" que puede complicar al sector exportador.

Según Antelo, la raíz de la escasez de divisas y los problemas con el suministro de combustible reside en la disminución de las exportaciones del país, y no en la falta de control por parte del sector privado.