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Tecnología china gana preferencias entre consumidores mexicanos
Por Luis Rojas y Wu Hao
Para Valeria Ramírez, su vida cotidiana en la capital mexicana ha mejorado en varios aspectos y se encamina hacia un modo "más inteligente" gracias al uso de tecnología procedente de China, mientras el intercambio bilateral en la materia con México cuenta con buenas perspectivas.
Ramírez, de 27 años, cree que los productos chinos y la tecnología en general procedente del país asiático han evolucionado favorablemente en varios ámbitos y avanzado entre las preferencias del consumidor local por su visión de anticipar las necesidades cotidianas.
"Me gusta que todo el tiempo están innovando, que quieren buscar nuevas cosas, que son marcas no tan cerradas, que tienen una imagen fresca, que quieren llegar al mercado, y lo están haciendo, al menos en México, de buena manera", explicó Ramírez a Xinhua.
La estudiante mexicana de comunicación y mercadotecnia utiliza una pulsera inteligente, o "smart watch", de la empresa china Xiaomi, que fabrica también teléfonos inteligentes, artículos para el hogar y vehículos eléctricos, entre otros productos.
La ventaja de los productos de Xiaomi es que pueden interconectarse entre sí, lo que facilita las actividades de los usuarios en el ámbito laboral, educativo, familiar y hasta en la interacción con las mascotas, según la joven mexicana.
"Sin duda es un concepto de casa o vida inteligente la manera en la que puedes interconectar todos tus dispositivos, creo que es un aliado ideal para poder adaptarlo de todas las maneras en las que te convenga", refirió.
Otra de las adaptaciones tiene que ver con el baile, ya que en el entorno de Ramírez los dispositivos Xiaomi también se utilizan para la práctica de la disciplina "zumba", que combina danzas y ritmos latinoamericanos, mediante el almacenamiento de música en un equipo y el monitoreo de la actividad física en la pulsera.
En coincidencia, la mexicana Sandra Monforte cree que su monopatín eléctrico (scooter) Xiaomi le ha resuelto sus necesidades de movilidad en la Ciudad de México, una populosa urbe de tráfico habitual, en los trayectos que ejecuta en el barrio de Polanco.
Otro factor a favor es que los productos del país asiático están orientados hacia el cuidado del medio ambiente, lo que contribuye a reducir las emisiones contaminantes en la Ciudad de México.
"Los productos de la marca china Xiaomi son muy buenos, me han ayudado muchísimo a entrar en esta parte tecnológica y a estar siempre en contacto con la tecnología, me duran muchísimo, la batería también dura muchísimo, lo cual hace que tengamos que cargarlo menos y ayudemos más al planeta", aseveró.
Para el investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Carlos Uscanga, la interconexión digital se ha vuelto un asunto clave en la vida cotidiana a nivel global, con efectos palpables en ámbitos sociales y económicos.
En lo que toca al vínculo tecnológico México-China, el experto consideró que la apuesta de los consumidores hacia el producto elaborado en el país asiático representa una buena opción, como lo ha demostrado la aceptación creciente de marcas chinas que ofrecen vehículos de diversa índole.
"En una ciudad tan caótica, con problemas ambientales como nosotros, el apostar a productos de mayor calidad y a precios competitivos, como podrían ser en este caso los autos eléctricos chinos, esto da una alternativa al consumidor", resaltó a Xinhua.
Uscanga consideró que en esta nueva fase con mayores productos chinos, México y China tienen oportunidades para desarrollar una mayor cooperación en el ámbito tecnológico e incluso en el académico.
También podrían generarse licencias de uso a tecnología de segunda generación, que puedan aprovechar las pequeñas y medianas empresas (Pymes) mexicanas, con los convenios y acuerdos correspondientes, sugirió el experto.
"Sabemos también que muchos de los proveedores de la electromovilidad de la Ciudad de México provienen de China, los trolebuses y otros vehículos, así que creo que también es importante eso", aseguró.
La Secretaría (ministerio) de Economía de México informó que la principal compra de México a China en 2023 fue de teléfonos, incluidos los teléfonos móviles y los de otras redes inalámbricas, por un valor levemente superior a los 9.000 millones de dólares.
El director general adjunto de Xiaomi para América Latina y gerente para México, Tommy Yang, explicó a Xinhua que, una vez superada la fase inicial de la pandemia del nuevo coronavirus, el mercado mexicano ha visto un rápido desarrollo y una mayor demanda de dispositivos tecnológicos, así como de inteligencia artificial (IA) y vehículos eléctricos.
"El mercado mexicano tiene grandes potenciales y uno de ellos es por su ubicación estratégica, además de su continuo flujo exportador, toda vez que cuenta con varios acuerdos bilaterales con otros países, como con China", explicó Yang, cuya firma inició operaciones hace siete años en México.
"También observamos que es un mercado con un importante número de consumidores jóvenes, por lo que vemos un enorme potencial en los próximos cinco a 10 años", agregó.
Yang resaltó también que la colaboración entre China y México en materia tecnológica está aumentando y enfrenta un gran potencial, con la demanda de los consumidores orientada cada vez más hacia la creación de "ecosistemas tecnológicos", con hogares inteligentes y mayor interconectividad.
El intercambio entre China y México también derivará en una mayor sostenibilidad entre las sociedades, ante los retos globales como el calentamiento global, entre otros, según el directivo.
"Así que los consumidores están tomando más conciencia de la aplicación de los productos amigables con el medio ambiente, de tal forma que entre China y México existe mucha colaboración, como por ejemplo en vehículos eléctricos y dispositivos inteligentes", expuso Yang.
"Todo ello va a impulsar una sociedad cada vez más amigable con el medio ambiente", subrayó.
La Ciudad de México, que concentra alrededor de 20 millones de habitantes junto con sus proximidades, ha logrado mejorar la calidad del aire considerablemente en las últimas dos décadas.
A través del Programa Ambiental y de Cambio Climático 2019-2024, la urbe capitalina logró superar la meta establecida para el 2024, que consistía en reducir el 10 por ciento de las emisiones de dióxido de carbono equivalente (CO2e) con base en las emisiones del año 2016, según las autoridades locales.
Actualmente, la capital mexicana registra una reducción de 2 millones 260.656 toneladas anuales de los gases que provocan el cambio climático, lo que representa un avance del 102,7 por ciento respecto a la meta establecida, de acuerdo con informes de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México.