China refuerza políticas de apoyo para impulsar comercio e inversión exterior

Panorámica nocturna del área de Lujiazui, en la municipalidad oriental china de Shanghai. (Xinhua/Wang Xiang)

La Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés), la primera del mundo de nivel nacional dedicada al tema de la importación, está a punto de celebrarse por séptimo año consecutivo en Shanghai, donde empresas extranjeras se reúnen para tomar el pulso al mercado chino.

Programada del 5 al 10 de noviembre, la VII CIIE ha atraído a participantes de 152 países, regiones y organizaciones internacionales, y ha logrado un nuevo récord con la asistencia de 297 compañías de la lista Fortune Global 500, así como líderes del sector.

En las seis ediciones anteriores se estrenaron cerca de 2.500 nuevos productos, tecnologías y servicios, y el volumen conjunto previsto de negocios superó los 420.000 millones de dólares.

La CIIE permite mostrar las principales medidas de apertura y la confianza de China, como también compartir sus nuevas oportunidades de desarrollo con otros países. Se ha convertido en una plataforma para la apertura de alto nivel y un bien público de todo el mundo.

China ha seguido desarrollando políticas encaminadas a estimular el crecimiento del comercio exterior y atraer la inversión extranjera, fomentando nuevas ventajas competitivas internacionales y obteniendo beneficios mutuos con otros países.

El 25 de octubre, el país emitió una directriz destinada a promover la experiencia de alinear algunas zonas de libre comercio elegibles y el Puerto de Libre Comercio de Hainan con normas económicas y comerciales internacionales de alto nivel.

Dichas zonas se encuentran en Shanghai, Guangdong, Tianjin, Fujian y Beijing. Las medidas piloto, que serán replicadas en otras áreas francas o incluso a escala nacional, abarcan seis aspectos: el comercio de bienes, el de servicios y el digital, al igual que la entrada de personal, el entorno empresarial y la prevención y el control de riesgos.

China ha construido 22 zonas piloto de libre comercio, que ocupan áreas costeras, interiores y fronterizas, las cuales contribuyen con alrededor del 20 por ciento del total de la inversión extranjera y el volumen de importaciones y exportaciones del país. El comercio exterior de estas zonas se expandió un 11,99 por ciento interanual durante los tres primeros trimestres de 2024.

Se han realizado continuos esfuerzos para reducir los aranceles. En septiembre, China anunció que daría a todos los países menos desarrollados con los que mantiene relaciones diplomáticas un tratamiento de arancel cero para el 100 por ciento de las líneas arancelarias, a partir del 1 de diciembre de este año.

De igual modo, ha continuado aplicando políticas orientadas a estimular un terreno fértil para los inversores extranjeros. La nueva edición de la lista negativa nacional a la inversión extranjera entró en vigor el viernes y eliminó los dos elementos restantes de la industria manufacturera que permanecían en la lista previa.

De tal modo, los puntos en el más reciente listado, en el que se especifican los campos vetados a los inversores del exterior, se han reducido aún más y ahora se limitan a 29.

Esto demuestra plenamente la activa voluntad china de ampliar los beneficios mutuos, así como una clara actitud de apoyo a la globalización económica, afirmó Jin Xiandong, un funcionario de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, y agregó que se harán mayores esfuerzos para promover el nivel de la liberalización y la facilitación de dicha inversión, e igualmente para optimizar el servicio dirigido a las empresas con inversión extranjera.

Además del sector manufacturero, también se está impulsando una apertura más amplia y profunda en el sector de servicios.

El país anunció en septiembre que permitiría el establecimiento de hospitales de propiedad totalmente extranjera en ciertas ciudades y regiones, entre ellas Beijing, Tianjin, Shanghai, Nanjing, Suzhou, Fuzhou, Guangzhou y Shenzhen, y en toda la isla de Hainan.

Asimismo, en octubre decidió permitir a los inversionistas foráneos que operaran negocios de su propiedad total, como centros de datos de Internet, y dedicarse al procesamiento de datos y transacciones en línea en determinadas áreas. Esto hace parte de un programa piloto cuyo propósito es extender la apertura en los servicios de telecomunicaciones de valor añadido.

En total, 42.108 nuevas empresas con inversión extranjera se crearon en China en los primeros nueve meses de 2024, un aumento interanual del 11,4 por ciento. Cabe destacar que el ingreso de esta inversión directa en la fabricación de equipos e instrumentos médicos subió un 57,3 por ciento, mientras que en la producción de computadores y dispositivos para oficina creció un 29,2 por ciento durante este período.

La apertura al mundo exterior no es solo una cuestión de "abrir la puerta", sino, lo que es más importante, de conectarse activamente con las normativas económicas y comerciales internacionales, como también con otras regulaciones de alto nivel, señaló el subdirector del Instituto de Economía y Política Mundiales de la Academia de Ciencias Sociales de China, Zhang Bin.

Zhang destacó la necesidad de potenciar la sinergia entre los mercados nacionales e internacionales, al igual que los recursos para cultivar y consolidar constantemente nuevas ventajas en la cooperación y la competencia económicas internacionales.