español>>Opinión

La cooperación entre países insulares del Pacífico Sur fortalece su capacidad de adaptación al cambio climático

Por DIARIO DEL PUEBLO digital | el 08 de febrero de 2025 | 15:04

Zhao Shuo Xiao Liyan

Los países insulares del Pacífico Sur, como Tuvalu, Kiribati y Fiyi, enfrentan una vulnerabilidad excepcional ante los impactos del cambio climático debido a su baja altitud, recursos limitados y dependencia económica de factores externos. Informes y estudios científicos señalan que el nivel del mar en la región ha aumentado a un ritmo superior al promedio global. En ciertas áreas, este incremento ha superado los 6 milímetros por año, lo que pone en riesgo la habitabilidad de estas islas, afectando directamente a las comunidades costeras, los recursos de agua dulce y la seguridad alimentaria.

Frente a estos desafíos, la cooperación regional ha emergido como un pilar clave para que estas naciones enfrenten los riesgos climáticos de manera colectiva. A través de la coordinación política, la movilización de recursos internacionales y el intercambio de conocimientos, los países insulares del Pacífico han implementado soluciones innovadoras, convirtiéndose en un ejemplo para otras regiones vulnerables.

IMPORTANCIA DE LA COOPERACIÓN REGIONAL

Las amenazas del cambio climático, como la erosión costera, los eventos climáticos extremos y la intrusión de agua salada en los acuíferos, afectan a todas estas islas de manera similar. Estas similitudes han impulsado la creación de plataformas como el Foro de las Islas del Pacífico (PIF) y el Programa Regional del Medio Ambiente del Pacífico (SPREP), que ofrecen marcos efectivos para coordinar estrategias y maximizar los recursos disponibles. Por ejemplo, mediante programas de formación orientados a la respuesta ante emergencias climáticas, se han generado impactos positivos en numerosas comunidades locales.

La cooperación regional también ha permitido que estas islas presenten una posición unificada en foros internacionales. Un ejemplo es la “2050 Strategy for the Blue Pacific Continent” (adoptada por los líderes del PIF), que define prioridades claras para la adaptación climática y canaliza financiamiento de instituciones internacionales enfocadas en proyectos sostenibles.

LOGROS ACTUALES DE LA COOPERACIÓN

En 2017, Fiyi asumió un papel de liderazgo en la conferencia climática, promoviendo con éxito el objetivo de limitar el calentamiento global a 1.5°C. Este esfuerzo no solo destacó las necesidades urgentes de las islas, sino que también fortaleció su influencia en la gobernanza climática global.

Gracias a iniciativas regionales orientadas a la resiliencia climática, países como Tuvalu y Kiribati han podido abordar problemas de gestión del agua dulce y la construcción de infraestructuras para prevenir inundaciones. Se estima que estos proyectos han beneficiado directamente a miles de personas, mejorando su calidad de vida y reduciendo la exposición a riesgos climáticos.

Asimismo, mediante programas de conservación, entre ellos la protección de arrecifes de coral, se han restaurado importantes zonas marinas en Fiyi. Esto contribuye a la seguridad alimentaria y sostiene la subsistencia de las comunidades pesqueras locales.

DESAFÍOS Y LIMITACIONES

A pesar del apoyo brindado por diversas instituciones, los recursos disponibles están muy por debajo de las necesidades de la región. Se calcula que los fondos requeridos para la adaptación superan con creces las asignaciones actuales.

La dispersión geográfica de las islas también incrementa significativamente los costos de implementación de proyectos. En algunas zonas, el transporte de equipos y personal técnico eleva notablemente los presupuestos, dificultando la continuidad de las iniciativas.

Asimismo, incluso con todas las medidas de adaptación, estas islas seguirán siendo altamente vulnerables si no se produce una reducción sustancial de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Muchos expertos alertan de que, sin acciones climáticas profundas, varias de estas naciones podrían volverse inhabitables hacia finales del presente siglo debido al aumento del nivel del mar.

CAMINOS PARA FORTALECER LA COOPERACIÓN

Para fortalecer la cooperación, un primer paso consiste en reforzar las capacidades de los organismos regionales. Si estos cuentan con estructuras y competencias más sólidas, podrán optimizar el uso de los recursos disponibles y mejorar la eficacia de los proyectos que lideren. En paralelo, se considera esencial desarrollar una plataforma de datos climáticos que funcione a escala regional. Esta iniciativa busca generar un sistema de información que permita tomar decisiones basadas en evidencia científica, al tiempo que facilita la colaboración entre las distintas islas.

Otro elemento fundamental es organizar eventos específicos que visibilicen los retos y necesidades de la región, tales como una “Cumbre de Adaptación del Pacífico”. Dicho foro serviría para atraer más apoyo técnico y financiero, involucrando así a la comunidad internacional de manera más activa. Finalmente, la participación comunitaria cobra gran relevancia, pues a través de la educación y la capacitación de las poblaciones locales, las acciones de adaptación adquieren un enfoque sostenible. Un ejemplo de ello es la experiencia en Tuvalu, donde la implementación de barreras naturales ha contribuido a reducir significativamente el impacto de las inundaciones costeras.

LECCIONES DESDE UNA PERSPECTIVA GLOBAL

La experiencia del Pacífico Sur muestra que la cooperación regional puede ser una herramienta decisiva para enfrentar los desafíos climáticos. Regiones como el Caribe o África Oriental podrían adoptar estrategias similares para potenciar sus recursos y fortalecer su resiliencia frente a desastres naturales.

La cooperación regional ha permitido a los países insulares del Pacífico Sur avanzar de forma significativa en su capacidad de adaptación al cambio climático. Sin embargo, las brechas de financiamiento y la dependencia de la acción global ponen en evidencia la necesidad de un apoyo continuo. Con mayor integración y respaldo internacional, estas islas pueden no solo asegurar su resiliencia, sino también servir como modelo de acción climática para el resto del mundo.

(Zhao Shuo es director del Centro de estudios de los países insulares del Pacífico del Instituto Regional y nacional de comunicación de la Universidad de Comunicación de China, y Xiao Liyan es profesora de la Universidad de Estudios y Comercio Internacional de Fuzhou)

(Web editor: 吴思萱, Zhao Jian)