Enviados de Trump y Putin se reunirán en Miami después de nuevas sanciones de EEUU

Kirill Dmitriev, enviado especial del presidente ruso, Vladimir Putin, para la inversión y la cooperación económica, se reunirá hoy sábado en Miami, Florida, con Steve Witkoff, enviado especial del presidente estadounidense, Donald Trump, para Medio Oriente, informaron medios de comunicación estadounidenses.

La reunión se produce pocos días después de que Trump canceló su plan de reunirse con Putin en Budapest, Hungría, y de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció sanciones contra Rosneft y Lukoil, los dos mayores productores de petróleo rusos, en un intento por presionar por un acuerdo de alto al fuego en Ucrania.

Dmitriev aseveró en la red social X que su visita estaba "planeada desde hacía tiempo con base en una invitación de la parte estadounidense".

El enviado ruso dijo el viernes en CNN que las sanciones, las primeras durante el segundo mandato de Trump, no serían un gran problema para Rusia, pero provocarían un aumento de los precios de la gasolina en Estados Unidos, y reiteró la postura de Putin de que Rusia nunca cederá a la presión.

Dmitriev también señaló que cree que se celebrará una cumbre Trump-Putin, pero "probablemente en una fecha posterior".

"El diálogo Rusia-Estados Unidos continuará, pero sin duda sólo será posible si se tienen en cuenta los intereses de Rusia y se tratan con respeto", afirmó.

Luego de una llamada telefónica con Putin y una reunión a puerta cerrada en la Casa Blanca con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, la semana pasada, Trump instó a Rusia y Ucrania a "detenerse donde están" para poner fin a su conflicto.

El miércoles, el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, anunció las sanciones contra Rosneft y Lukoil, y pidió "un alto al fuego inmediato", y agregó que la Casa Blanca está dispuesta a tomar medidas adicionales de ser necesario.

También el miércoles, Trump confirmó que canceló su reunión con Putin en Hungría, y dijo que "no me parecía bien".

Estados Unidos y sus aliados han impuesto múltiples rondas de sanciones financieras y comerciales a Rusia desde el inicio del conflicto Rusia-Ucrania en febrero de 2022, dirigidas a los bancos rusos, las industrias de defensa y las exportaciones de energía.