Xinjiang amplía su cosecha arroz a nuevos campos desérticos

Por Fang Aiqing y Mao Weihua

Cosecha arroz de siembra tardía en alrededor de 267 hectáreas de campos desérticos salino-alcalinos en Qianhai, Tumxuk, región autónoma uygur de Xinjiang. [Foto: proporcionada]

Alrededor de 267 hectáreas de campos de arroz salino-alcalinos han sido cosechadas en el desierto de Qianhai, Tumxuk, región autónoma uygur de Xinjiang. Antes, esas eran tierras muy desertificadas donde casi nada podía crecer. Ahora, la zona se ha transformado en campos de prueba para el cultivo de arroz a gran escala, que busca restaurar la ecología local y aumentar los ingresos agrícolas.

Ubicada en el borde occidental del desierto de Taklamakán, el más grande de China, Tumxuk comenzó a principios de este año a rehabilitar estas tierras salino-alcalinas. Después de las mejoras en el suelo, en junio se plantaron variedades de arroz resistentes a la sequía y tolerantes a la sal.

El arroz de siembra tardía se cosecha en 267 hectáreas de campos desérticos salino-alcalinos de Qianhai, Tumxuk, región autónoma uygur de Xinjiang. [Foto: proporcionada]

Una vez que las plantas de arroz tardío alcanzaron de 1 a 3 centímetros de altura, comenzó el método de riego intermitente, creando un ambiente aireado para el crecimiento de las raíces con reducción de la evaporación de agua.

El técnico Zhang Yuanqiang considera que este enfoque de conservación de agua y lavado de sal ahorró entre un 20 y un 30 por ciento de hidratación en cultivos.

Para garantizar la calidad del arroz y evitar daños químicos al suelo, no se utilizaron pesticidas. Zhang precisó que aprovecharon al máximo la abundante luz solar para el control natural de plagas, mientras empleaban el lavado de sal in situ y dejaban la paja en su lugar para lograr un ciclo virtuoso: nutrir el arroz con agua, mejorar el suelo con las plantas de arroz y conservar el agua con la paja que lo cubre.

Zhang también aseguró que los campos de arroz en el desierto han llegado a producir más de 100 kilogramos por mu, un resultado bastante satisfactorio.

Por su parte, el agricultor Zhang Fei adelantó que desde la propia cosecha ha estado colaborando con una empresa procesadora de arroz para facilitar sus ventas.