SANTIAGO, 26 may (Xinhua) -- El canciller chileno Heraldo Muñoz dijo hoy que su país "otorga salida al mar a Bolivia a perpetuidad, aunque no sea una salida soberana", mediante el Tratado de 1904.
En un encuentro en su despacho con corresponsales extranjeros, el ministro resaltó que "hay que acabar con el mito de que Bolivia no tiene salida al mar".
Dicho tratado estableció a perpetuidad los límites territoriales entre ambos países vecinos, que se enfrentaron en el siglo XIX en una guerra. En ese conflicto, Bolivia y Perú perdieron miles de kilómetros de sus territorios a manos de Chile, y los bolivianos quedaron sin mar.
Según Muñoz, la presidenta Michelle Bachelet tomará una decisión definitiva respecto a la posibilidad de impugnar la competencia de la Corte Internacional (CIJ) de La Haya para resolver el reclamo presentado por Bolivia, una vez que haya consultado a todos los sectores políticos chilenos.
Puntualizó que Chile está más cerca de rechazar la competencia de esa Corte que de definir su impugnación en la mediterraneidad de Bolivia.
"Estamos un poco más cerca de determinar el cuándo se va a objetar, que si se va a impugnar la competencia de la corte", precisó.
Reiteró que el tema marítimo a La Haya, "está totalmente cerrado" para Chile, aunque está dispuesto "a conversar sobre otros aspectos de la relación bilateral".
Durante el primer gobierno de Bachelet (2006-2010), Chile y Bolivia desarrollaron una agenda de cooperación de 13 puntos, que incluyó el tema del mar, pero durante la siguiente administración del presidente Sebastián Piñera, fue paralizada, motivando que Bolivia acudiera a La Haya.
Muñoz insistió en que "la demanda de Bolivia es artificiosa", porque no tiene sustento jurídico.
Destacó que "es básicamente una demanda político-comunicacional que busca, de una manera encubierta, desconocer el tratado (de límites) de 1904 o de revisarlo sin que haya acuerdo entre las partes".
Recalcó que "Chile otorga salida al mar a Bolivia. No es una salida soberana, pero es una salida que es a perpetuidad por los territorios y por los puertos de Chile", en alusión al tratado de 1904 que obliga al Estado chileno a facilitar el acceso al mar el vecino país.
El pasado 15 de abril, el gobierno del presidente Evo Morales presentó la memoria de su demanda contra Chile ante esa corte y, a partir de esa fecha, el gobierno chileno tiene 90 días para recurrir a lo que se conoce como "excepciones preliminares".
De acuerdo con el canciller, otra de las opciones es plantear la impugnación en la contramemoria, donde Chile deberá responder a los argumentos presentados por Bolivia, que busca que esa Corte obligue a Chile "a negociar de buena fe una salida soberana al mar" a partir del concepto de "derechos expectaticios".
Si opta por esta variante, tendrá como plazo hasta el 18 de febrero de 2015.
Para La Paz, se han creado esos derechos con las diferentes propuestas que ha hecho Chile a través de la historia para que Bolivia acceda al mar, especialmente la del jefe del régimen militar chileno, Augusto Pinochet, quien negoció con el presidente de facto de Bolivia, Hugo Bánzer, en 1975.
La iniciativa, que incluyó la elaboración de un mapa con un corredor para Bolivia al norte de la ciudad de Arica, fracasó porque La Paz no accedió a compensar territorialmente a Chile y Perú, que tiene derecho a opinar sobre cualquier negociación sobre terrenos que le pertenecieron, la rechazó.