Presidente chino pide creación de "redes" antiterrorismo en Xinjiang

  2014:05:30.08:31

BEIJING, 29 may (Xinhua) -- El presidente chino, Xi Jinping, pidió "redes con una extensión desde el suelo hasta el cielo" para luchar contra el terrorismo en Xinjiang, y subrayó la estabilidad de largo plazo como la meta principal de la región.

Xi hizo estas declaraciones en la segunda conferencia de trabajo central sobre la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, un evento de dos días de duración que concluyó hoy.

Al exhortar a que se tomen más precauciones y se lleve a cabo la cooperación antiterrorista internacional, Xi pidió "murallas hechas de cobre y hierro" y "redes con una extensión del suelo al cielo" para capturar a los terroristas.

La conferencia se realizó tras una serie de ataques terroristas sangrientos en la región, incluido el más reciente, ocurrido el 20 de mayo, en un mercado al aire libre en Urumqi, capital regional, que dejó 39 muertos y 94 heridos.

Xi solicitó un trabajo religioso "meticuloso" y subrayó que debe prestarse atención para ayudar a la religión a adaptarse a una sociedad socialista y garantizar el papel de las figuras y creyentes religiosos en el impulso del desarrollo económico y social.

Debe prestarse atención "a impulsar un equipo de clérigos patrióticos y de elevar la calidad general de la gente del círculo religioso, a fin de garantizar que el liderazgo de las organizaciones religiosas esté firmemente en manos de gente que ame al país, así como a la religión", afirmó.

Xi dijo que el principio básico para disminuir las tensiones religiosas es proteger las actividades religiosas, disuadir las ilegales y extremistas, evitar la infiltración y combatir los crímenes.

El presidente afirmó que las demandas religiosas normales deben ser protegidas de acuerdo con las leyes y reglamentos y sus costumbres deben ser respetadas.

"Los canales legales para que la gente religiosa adquiera con precisión el conocimiento religioso deben ser ampliados", agregó.

Este mes, el departamento de seguridad pública de Xinjiang dijo que la policía local desarticuló a 23 grupos terroristas y extremistas religiosos y que capturó a 200 sospechosos.

COMO SEMILLAS DE UNA GRANADA

El presidente urgió a todos los grupos étnicos en Xinjiang a que "se muestren entendimiento, respeto, tolerancia y aprecio entre sí, y a que aprendan y se ayuden mutuamente" para que puedan estar unidos "como semillas de una granada".

"Entre más intenten los separatistas sabotear nuestra unidad étnica, más debemos esforzarnos por reforzarla", dijo el presidente, quien agregó que la unidad es la "línea de vida" para la gente de todos los orígenes étnicos.

El presidente subrayó la importancia de que los residentes de Xinjiang, sin importar su origen étnico, se identifiquen con China, su cultura y con el socialismo con características chinas.

Es necesario hacer esfuerzos para permitir que todos los grupos étnicos contribuyan al sueño chino de la gran revitalización y compartan el fruto del desarrollo y prosperidad de China, afirmó Xi.

El presidente sugirió que las autoridades fortalezcan los intercambios y comunicación entre los diferentes grupos étnicos, promuevan la educación bilingüe y se esfuercen por una estructura social más integrada y por un ambiente comunitario donde la gente no esté agrupada sólo por su origen étnico.

También deben permitir y alentar a más gente de grupos minoritarios a recibir educación, trabajar o vivir en otras partes del país, para elevar el entendimiento mutuo entre diferentes grupos étnicos e impulsar los lazos entre ellos, indicó Xi.

BUEN GOBIERNO EN XINJIANG

El buen gobierno en Xinjiang es vital para todo el Partido y el país, por lo cual el China debe desarrollar una estrategia integral y de largo plazo en la región, dijo Xi.

"La estrategia de nuestro partido en Xinjiang ha demostrado ser correcta y debe mantenerse en el largo plazo. Debemos mantener la serenidad y la confianza en nuestra estrategia", expresó.

"Además, debemos actualizar nuestras políticas de acuerdo con las situaciones actuales de Xinjiang", afirmó.

Una prioridad de buen gobierno es mejorar el nivel de vida de la gente para que todos los integrantes de grupos étnicos se sientan atendidos por el Partido y el Estado, agregó. Prometió que el gobierno se enfocará en el empleo, la educación y el alivio a la pobreza.

Con base en las propuestas de Xi, el gobierno destinará más recursos a instalaciones educativas y trabajará para matricular a más niños en las escuelas, además de llevar a cabo más programas de alivio a la pobreza en áreas rurales y fronterizas de Xinjiang, dijo.

Se emitirán políticas especiales respecto al desarrollo del sur de Xinjiang, lugar con una difícil geografía y bajos estándares de vida.

Otras provincias continuarán ofreciendo apoyo financiero y enviando profesionales a Xinjiang.

Además, se mejorarán los servicios culturales públicos e internet se manejará mejor para alentar el patriotismo y promover los valores socialistas.

El PCCh y sus órganos desempeñarán un papel líder en el desarrollo del buen gobierno en Xinjiang, afirmó Xi.

El Partido necesitará funcionarios "que tengan una firme postura política, elevada competencia e integridad sólida".

El PCCh promoverá a funcionarios que sean leales, lo suficientemente valerosos como para enfrentar momentos críticos, apreciados por la gente y con buen manejo de emergencias y situaciones complicadas, añadió el presidente.

Los órganos del Partido a nivel de las bases deben convertirse en una fuerza para servir a la gente, mantener la estabilidad y combatir a los separatistas.

La primera reunión de trabajo central sobre Xinjiang tuvo lugar en el año 2010, cuando las autoridades centrales pidieron a la región impulsar su desarrollo económico, político, cultural y social con el fin de lograr "un amplio desarrollo y una estabilidad duradera".

En esa reunión, el entonces presidente Hu Jintao prometió que para el año 2015, el producto interno bruto (PIB) per cápita de Xinjiang debería igualar el nivel promedio del país, y que el ingreso de los residentes así como su acceso a servicios públicos básicos debería alcanzar el nivel promedio de las regiones occidentales del país.