BUENOS AIRES, 9 jun (Xinhua) -- Las pasarelas para admirar los mayores saltos de las Cataratas del Iguazú -1.360 kilómetros al nordeste de Buenos Aires- fueron clausuradas "por razones de seguridad" tras una enorme crecida del río de igual nombre, dijeron hoy medios locales.
La Administración de Parques Nacionales dijo que se ordenó el "cierre preventivo del acceso al mirador de la Garganta del Diablo" ante la crecida del río.
Las estaciones de monitoreo del Iguazú registraban al momento de la decisión el paso de 46.300 metros cúbicos por segundo, equivalente a 33 veces el caudal normal del río, apuntó este lunes la fuente citada por medios locales.
En apenas 24 horas el río Iguazú cambió su fisonomía luego que el agua se puso más rojiza que el domingo debido a las lluvias en las altas cuencas y el deslave de las barrancas.
El centro de monitoreo hidrológico de la empresa de energía brasileña Copel registró un caudal de 5.230 metros cúbicos por segundo y en 24 horas trepó a 46.300 metros cúbicos por segundo.
El registro más alto para ese mismo fenómeno hasta el momento se verificó en 2005, cuando el Iguazú tuvo un caudal de 36.000 metros cúbicos por segundo, bastante menor que la crecida actual pero, como ahora, también se clausuraron las pasarelas.
Según los registros oficiales, en 2013 una creciente mucho menor arrastró 28 de los 99 tramos que permiten una aproximación a la Garganta del Diablo, el más espectacular de los 275 saltos de ese punto turístico considerado una de las maravillas del mundo.