RIO DE JANERIO, 17 jun (Xinhua) -- Los aficionados brasileños salieron decepcionados por el rendimiento que mostró hoy la selección anfitriona de la Copa del Mundo, tras empatar sin goles ante el equipo de México en la ciudad de Fortaleza.
Al igual que el día en que Brasil debutó en su Copa del Mundo, desde horas de la mañana los habitantes de Río de Janeiro salieron temprano a hacer sus compras y a adquirir de última hora algunas camisetas y otros distintivos.
A eso del medio día, los locales comerciales en el centro de la ciudad fueron cerrando poco a poco sus puertas, para que sus empleados pudiesen ir a sus casas o centros de reunión para ver a la selección.
Calles colapsadas por el tránsito, enormes filas en las paradas de autobús y gran cantidad de personas en las estaciones de metro, fueron parte del panorama que Xinhua pudo corroborar en un recorrido por varios puntos de la ciudad.
A la hora del juego, la zona central de Río lucía vacía, pero en la playa de Copacabana se congregó una multitud en busca de la mejor posición para disfrutar el partido en restaurantes, bares o en las pantallas gigantes apostadas por FIFA sobre la arena.
Aquí, también gran cantidad de turistas mexicanos se dieron cita, uniformados con sus camisetas verdes, para apoyar a distancia al "Tri", que consiguió al final un gran resultado en sus aspiraciones de pasar a la siguiente ronda.
"Todo muy bien, creo que pudimos haber ganado, pero bueno esperamos tener la victoria contra Croacia en el siguiente juego y no importa a quién enfrentemos después en segunda ronda", dijo Carlos Rodríguez, aficionado mexicano.
En contraste, los aficionados brasileños salieron de Copacabana con cara de molestia, esperando que su equipo mejore el rendimiento para los partidos que vienen.
"Mal para Brasil, pero creo que estos son los dos equipos que se van a clasificar a la siguiente ronda, México y Brasil", comentó a Xinhua Mauricio Goncalvez.
"Scolari tiene que cambiar algo para el partido contra Camerún, si Brasil no mejora en el próximo partido, no va a llegar con fuerza a la segunda ronda. La selección tiene que trabajar para ser la campeona del mundo", expresó Mauro Silva.
El próximo juego de Brasil será ante Camerún el próximo lunes en Brasilia, mientras que México juega ese mismo día frente a la selección de Croacia.
(Editor:Felipe Chen、Rocío Huang)