NAIROBI, 17 jun (Xinhua) -- El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, dijo hoy que los ataques contra civiles en la región costera del país, donde al menos 60 personas han sido asesinadas, no son llevados a cabo por el grupo Al-Shabaab.
En una conferencia de prensa televisada y ofrecida en Nairobi, Kenyatta culpó de los asesinatos a redes políticas locales y a la policía local por no emprender acciones a partir de la información de inteligencia.
"El ataque en Lamu fue violencia étnica bien planeada, orquestada y motivada políticamente contra una comunidad keniana, con la intención de desalojarlos por razones políticas. Por lo tanto, este no fue un ataque terrorista de Al-Shabaab", dijo Kenyatta a la nación.
El presidente hizo la declaración después de que milicianos de Al-Shabaab se atribuyeran los ataques del domingo y lunes que dejaron a decenas de muertos y a muchos más heridos.
A través de su estación de radio Andalus, Al-Shabaab dijo que llevaron a cabo nuevos ataques en varias aldeas de Mpeketoni y que mataron a más de 20 personas, incluidos policías, y que incendiaron varias casas en el área.
Sin embargo, Kenyatta dijo que la evidencia muestra que redes políticas locales estuvieron involucradas en la planeación y ejecución de los ataques.
"Ahora está claro que la inteligencia sobre este ataque estuvo disponible para los oficiales de seguridad de Mpeketoni", dijo molesto Kenyatta.
"Desafortunadamente, los oficiales no actuaron como correspondía. Esta negligencia y abdicación del deber es inaceptable. En consecuencia, todos los oficiales involucrados han sido suspendidos y serán procesados inmediatamente en un tribunal", prometió.
El presidente dijo que los kenianos han sido víctimas del terrorismo en el pasado y que la amenaza del terrorismo sigue acechando a la nación y a la vecina Somalia.