BEIJING, 26 jun (Xinhua) -- A pesar de las buenas ventas impulsadas por el Mundial de Fútbol, los beneficios de los fabricantes de televisores de China continúan cayendo, las ventas continúan siendo débiles y la sombra de internet se cierne sobre ellos.
En el primer semestre de este año, las ventas totales cayeron un 9 por ciento interanual hasta los 20,8 millones de unidades, siguiendo la tendencia a la baja del año pasado. Los informes financieros de los principales fabricantes han sido decepcionantes. La empresa electrónica Sichuan Changhong registró un descenso de más del 90 por ciento en sus beneficicios en el primer trimestre; a ésta le siguieron Kongka, con una caída del 33 por ciento, y Hisense, con una disminución del 8 por ciento.
El Mundial ha ayudado a las ventas, pero es improbable que se prolongue a largo plazo y su impacto es limitado. El rotativo China Securities Journal informó de que los últimos dos meses habían sido anormales y el mini auge terminará al tiempo que termine el evento deportivo.
Las ganancias de los gigantes de televisores se han ralentizado en los últimos años. En 2013, la tasa de beneficios se estimaba en el 1,9 por ciento. Incluso en los buenos tiempos de 2011 y 2012, cuando el gobierno concedía subsidios al sector, dicha cifra nunca sobrepasaba el 3 por ciento.
Con la llegada al mercado de las firmas de internet, lideradas por Lenovo y Xiaomi, los aparatos de televisión se están volviendo más inteligentes y más baratos. Cuentan con un rico contenido de video, lo que supone una fuerte competencia para los aparatos tradicionales. El contenido y la experiencia del consumidor rebasará en breve a la calidad del producto como principal campo de batalla en el que competir en el futuro.