BEIJING, 9 nov (Xinhua) -- La teoría de la "nueva condición normal" elaborada por el presidente de China, Xi Jinping, será un hito que será grabado en la historia durante las actuales reuniones del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
En su discurso pronunciado ante más de 1.500 líderes empresariales de la región de Asia-Pacífico durante la Cumbre de Líderes Empresariales de APEC celebrada hoy, Xi, por primera vez, hizo un esquema general de la "nueva condición normal" de la economía china.
"Una nueva condición normal de la economía de China ha emergido con varias características importantes", dijo el presidente.
Primero, la economía ha pasado de tener un crecimiento de alta velocidad a un crecimiento de mediana a alta velocidad. Segundo, la estructura económica está siendo mejorada y modernizada de forma constante. Tercero, la economía está cada vez más dirigida por la innovación en lugar de las materias primas y la inversión, añadió Xi.
LA NUEVA CONDICION NORMAL FRENTE A LA VIEJA NORMALIDAD
La "nueva condición normal" no es nada nuevo. Fue popularizada primero por el gigante de fondos de bonos Pacific Investment Management Co., con sede en California, para describir el crecimiento por debajo del promedio luego de la crisis mundial.
El término ganó terreno en China cuando en mayo, el presidente Xi, durante su recorrido de inspección por la provincia china central de Henan, describió la necesidad de adaptarse a la "nueva condición normal" y mantenerse serenos ante la reducción de velocidad.
La segunda economía más grande del mundo tiene un año inestable con un crecimiento que cayó en el tercer trimestre a niveles no vistos desde la crisis financiera mundial de 2008-2009, arrastrada por la desaceleración inmobiliaria, la baja de la demanda interna y las exportaciones inestables.
Esta desaceleración es calificada de "nueva condición normal" porque solía haber una vieja.
En los 35 años entre 1978 y 2013, el crecimiento anual de la economía china fue en promedio cercano al 10 por ciento y, entre 2003 y 2007, fue de 11,5 por ciento. Junto con esto vino el cambio del destino de varios cientos de millones de chinos que fueron sacados de la extrema pobreza.
Sin embargo, los "viejos buenos días" no pueden durar para siempre. El crecimiento se desaceleró a 7,7 por ciento en 2012 y 2013, y en los primeros tres trimestres de 2014 la cifra es de 7,4 por ciento.
Incluso si esto puede continuar, no es algo deseable, ya que por las tres décadas de crecimiento ininterrumpido de doble dígito se pagó el costo de contaminar el aire y explotar exhaustivamente los recursos naturales.
Desde hace mucho tiempo se debió replantear el crecimiento de China bajo una nueva condición normal, con un nuevo pensamiento y un nuevo marco.
NUEVA CONDICION NORMAL, NUEVA MODALIDAD
La economía china necesita un freno y, lo que es más importante, una revisión para sacarla de una modalidad de crecimiento insostenible.
Algunos analistas consideran la "nueva condición normal" como sinónimo de desaceleración y están nerviosos por las tibias cifras del motor de la economía mundial.
En un artículo publicado en septiembre en el Daily Telegraph de Reino Unido se indicó que la desaceleración de China es el principal indicador de las "10 señales de advertencia del colapso financiero mundial".
La desaceleración es una parte importante de la "nueva condición normal", pero no lo es todo.
La esencia de la "nueva condición normal" no es sólo la velocidad. Está más relacionada con una mejor estructura económica que dependa más de la industria terciaria y de la demanda del consumidor, así como de la innovación.
Este cambio ya está ocurriendo. En los primeros tres trimestres de este año, el consumo final rebasó la inversión y contribuyó al 48,5 por ciento del crecimiento económico, mostraron cifras oficiales.
El valor añadido de la industria de servicios, el cual representa el 46,7 por ciento del producto interno bruto (PIB), volvió a superar al de la industria secundaria.
La industria de alta tecnología y la industria de fabricación de equipo crecieron 12,3 y 11,1 por ciento respectivamente, notablemente más que la tasa de crecimiento industrial promedio.
Estas cifras muestran que la economía china atraviesa profundos cambios estructurales y un mejoramiento en calidad y estructura, dijo Xi.
La nueva condición normal no está exenta de riesgos. La economía china enfrenta en estos momentos los posibles riesgos generados por la burbuja inmobiliaria, el sector financiero, la banca en la sombra, la sobrecapacidad y la falta de innovación.
"Si bien hay riesgos, no son extraordinarios", aclaró Xi.
TRANQUILIDAD Y NUEVAS OPORTUNIDADES
El discurso del líder chino sobre la "nueva condición normal" en el escenario internacional debe servir primero para tranquilizar al mundo sobre la salud y la vitalidad de la economía china, dijeron observadores.
El acceso más fácil al mercado y un mercado más eficiente también vendrán con la "nueva condición normal", bajo la cual el gobierno seguirá levantando las restricciones sobre la "mano invisible" del mercado y garantizará el adecuado papel de la mano visible del gobierno.
Dicho esto, la economía china bajo la "nueva condición normal" puede no sólo evitar el colapso previsto por algunos pesimistas, sino que también puede brindar nuevas oportunidades al mundo.