Hay una gran simetría en la perspectiva de futuro de ambos países
Pueblo en línea:
¿Cómo es la Costa Rica que usted empezó a presidir en mayo de 2014?
Luis Guillermo Solís:
La encontré un poco complicada. Costa Rica es una democracia madura, pero durante las últimas décadas, dos décadas especialmente, el modelo de Estado de bienestar que se había generado después de nuestra última guerra civil en 1949, que también es una fecha muy emblemática en China, y que llamó la atención del presidente Xi Jinping, se degradó mucho este Estado de bienestar, ha aumentado la desigualdad, la pobreza está rondando un 23% de la población costarricense, es decir, más de un millón de costarricenses viven la pobreza y pobreza extrema. Esto es inadmisible en una democracia como la nuestra. Por eso hablé en algún momento de que Costa Rica, cuando yo recibí el mandato popular, lucía como una finca encharralada, como una finca que estaba llena de maleza. Hemos empezado un proceso gradual de transformación que el pueblo de Costa Rica quiere que se acelere. Hay una gran ansiedad por lograr cambios en el orden de la gobernanza, en el orden de la rendición de cuentas, en el orden del ordenamiento de las finanzas públicas. Se quiere que los problemas heredados como un déficit de alrededor del 6%, un desempleo de alrededor de un 8% y un crecimiento económico que alcanza cifras importantes en el conjunto de América Latina pero que son insuficientes para el desarrollo nacional del 3,5% anual. La estimación es que este año podríamos crecer hasta el 4,2% del PIB, por lo tanto es una marca buena en América Latina, pero no suficiente para nosotro. Este tipo de problemas estructurales puedan ser resueltos. Estamos en ello. Parte del objetivo de mi viaje a China, como en su momento fueron los viajes a Estado Unidos, Brasil y México, tiene que ver con la búsqueda de nuevas inversiones que generen empleo de buena calidad y que Costa Rica tenga esta posibilidad. Es decir, superar en los cuatro años de mi mandato, algunos de los problemas que heredamos.
Pueblo en línea:
¿Cómo China puede conocer mejor a Costa Rica?
Luis Guillermo Solís:
Ahí hay mucho que hacer. China es un país, o mejor dicho, un continente inmenso. Tiene condiciones aún más complejas que un país como Brasil, México o Argentina porque se encuentra lejos de nuestra realidad cultural e histórica. Esto requiere de un intercambio de información permanente. Requiere de mucha mayor cercanía desde el punto de vista académico, intelectual, necesitamos entendernos mejor, acercarnos más. Eso pasa por una serie de actividades que van desde el aprendizaje del mandarín, como una etapa muy importante del acercamiento, cuando uno aprende una lengua como el mandarín o como el español, en el caso de China, adquiere a través de esa lengua una serie de sensibilidades especiales que nos ayudan a entendernos mejor hasta poder contar con estudios formales sobre la realidad de China y sobre la historia y la realidad de Latinoamérica, de parte de los centros académicos chinos. Yo me sentí muy honrado por el doctorado honoris causa que me concedió la Universidad Renmin porque eso expresa en mi caso especialmente, siendo un profesor universitario con más de 30 años de experiencia docente y como investigador, la importancia que se atribuye a ese vínculo como académico entre científicos sociales pero también científicos naturales que pueden construir estos entendimientos. Considero al respecto que es fundamental el intercambio de información, de hecho así lo hemos solicitado en materia turística por ejemplo que es un tema que a nosotros nos interesa mucho, pero que también tiene que extenderse a otros temas. El que nos conozcamos mejor en nuestra literatura, en nuestra música, en nuestras luchas sociales, constituye una condición necesaria para completar y concretar las relaciones de largo plazo de tipo estratégico que queremos con China.