El presidente chino, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang, ordenaron que se hagan los máximos esfuerzos y advirtieron a los socorristas que estén alertas ante desastres secundarios.
Un equipo de trabajo enviado por el Consejo de Estado, el gabinete chino, se dirige al sitio para supervisar los esfuerzos de búsqueda y rescate.
Los aldeanos creen que la actividad minera excesiva pudo ser la causa del desastre.
Shanyang es un distrito rico en vanadio y en él se localizan varias minas. Los residentes han expresado en diversas ocasiones su preocupación por el impacto de las actividades mineras en el medio ambiente.