Estados Unidos busca acelerar el agotamiento de las reservas de hidrocarburos tradicionales en el mundo, alertó hoy el asesor de la Comisión de Energía y Petróleo de la Asamblea Nacional (AN, Poder Legislativo) de Venezuela, Fernando Travieso.
A través de la explotación del crudo de esquisto, Estados Unidos busca acelerar el agotamiento de las reservas tradicionales con el fin de forzar la concesión de éstas últimas a las transnacionales del sector, ante la abrupta caída de los precios internacionales, explicó el economista y experto petrolero venezolano.
Travieso afirmó en entrevista a la estatal Venezolana de Televisión que la estrategia de los grandes "lobbys" (grupos de cabildeo) financieros es mantener el mayor tiempo posible las bajas cotizaciones del petróleo en el mercado mundial, en detrimento de los estados productores, sobre todo Venezuela que posee las mayores reservas certificadas del orbe.
"Si los precios del petróleo suben las economías de Estados Unidos y de Europa entrarían en una profunda recesión, pero manteniendo los precios bajos estos grandes consorcios pueden desestabilizar a los Estados- nación productores y presionarlos para que privaticen el sector sin que afecte sus economías. La actual coyuntura es un problema de orden geopolítico con una apariencia económica", afirmó.
El experto señaló que algunas compañías prestadoras de servicio estadounidenses como la Halliburton y Schlumberger Limited, que impulsan mecanismos de financiamiento para fomentar la producción de esquisto a pesar de los costosos procesos de refinación que hace poco rentable esa actividad, tienen un papel importante.
Para el analista venezolano, tal estrategia se debe al marcado interés de las transnacionales petroleras de agotar las reservas a nivel mundial al tener que elevar la producción para contrarrestar los bajos precios.
Otro objetivo, indicó, es apropiarse de dichos reservorios a partir del debilitamiento económico de los países productores, donde los recursos energéticos estén en posesión del Estado.
"Quieren destruir los Estados- nación que tienen las reservas de petróleo, incluso a la propia Arabia Saudita donde en la frontera con Yemen hay un movimiento independentista que amenaza con desestabilizar el país. En el caso de Venezuela generan un conflicto de laboratorio con Guyana a través de la Exxon Mobil y ahora con Colombia", precisó.
Por ese motivo, manifestó, la propuesta del presidente venezolano Nicolás Maduro ante la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de convocar una reunión de alto nivel para consensuar un recorte de la producción diaria de crudo, es acertada y pertinente.
No obstante, la negativa de Arabia Saudita, Kuwait y Emiratos Arabes Unidos ha frenado en el pasado dicha posición de Venezuela, pues según sus autoridades, los productores independientes pueden copar ese nicho abierto por los miembros de la OPEP.
"De ahí la reunión que sostuvo Maduro hace apenas unos días con el presidente Vladimir Putin, al ser Rusia el más grande productor de crudo fuera de la OPEP para acordar estrategias conjuntas que tiendan a la estabilidad del mercado y al alza de los precios", recordó.
En opinión del experto, este encuentro puede ser decisivo en el futuro cercano de concretarse una cumbre de la organización internacional, como ha pedido el jefe de Estado venezolano.
"Un reunión de la OPEP de darse puede favorecer al alza de los precios, pero hay que estar preparados para un contraataque de estos conglomerados petroleros que van a volver a inundar el mercado con el crudo de esquisto", concluyó Travieso.