BEIJING, 30 sep (Xinhua) -- El presidente de China, Xi Jinping, y otros altos líderes asistieron hoy miércoles a una ceremonia celebrada con motivo del Día de los Mártires en la Plaza de Tian'anmen, en el centro de Beijing, para honrar y conmemorar a los héroes nacionales caídos.
Veteranos, algunos miembros de las familias de los mártires y representantes de todos los sectores sociales también se reunieron en la plaza para celebrar el segundo Día de los Mártires en la víspera del Día Nacional del país.
El monumento de mármol, cuya base fue colocada el 30 de septiembre de 1949, se erguía bajo un cielo azul.
La ceremonia comenzó con una multitud de 3.000 personas cantando el himno nacional, para después inclinar sus cabezas en homenaje silencioso.
Tras una canción patriótica interpretada por escolares vestidos con camisas blancas y pañuelos rojos, el uniforme del Cuerpo de Jóvenes Pioneros, se colocaron cestas de lirios delante del monumento, cada una llevada por dos soldados.
El presidente Xi arregló una cinta roja atada a una de las cestas y encabezó un grupo de funcionarios de alto nivel en un paseo de homenaje alrededor del monumento.
Los alumnos y otros participantes los siguieron y entregaron sus ramos de crisantemos al pie del monumento.
Los mártires, tal como se definen por el gobierno, son "personas que sacrificaron sus vidas por la independencia y la prosperidad nacionales, así como por el bienestar del pueblo en los tiempos modernos, o sea, después de la Primera Guerra del Opio (1840-1842)".
Se estima que hay alrededor de 20 millones de mártires en China.
El máximo órgano legislativo del país aprobó que el 30 de septiembre sea el Día de los Mártires el año pasado, con el fin de recordar a los que perdieron su vida luchando por la independencia y la prosperidad nacionales.