Reducir la contaminación atmosférica al nivel registrado durante los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 podría evitar cerca de 900.000 muertes por causas cardiovasculares en las áreas urbanas de China para 2030, indicó hoy un estudio.
Para garantizar un aire limpio para los Juegos Olímpicos de 2008, China cerró temporalmente fábricas, suspendió obras en construcción y limitó el tráfico vehicular en Beijing.
En el nuevo estudio, los investigadores del Hospital Fuwai de Beijing y de otras agencias de investigación simularon dos escenarios de mejora de la calidad del aire de 2015 a 2030, cada uno logrado de forma gradual en el transcurso de 10 años.
Una simulación fue de la calidad del aire durante los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, cuando se registró un nivel de materias de partículas finas (PM2,5) de 55 microgramos por metro cúbico. La otra fue de la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de 10 microgramos por metro cúbico.
Para la comparación, los investigadores proyectaron el efecto de una reducción de 50 por ciento del tabaquismo y los fumadores pasivos y una disminución de la presión sanguínea sistólica alta a 140 milímetros de mercurio, las dos en un plazo de cinco años.
Los investigadores encontraron que el nivel de calidad del aire de las Olimpiadas de 2008 reduciría las muertes por embolia en 2,7 por ciento y las muertes por enfermedades cardíacas coronarias en 7,2 por ciento en las zonas urbanas de China, incluyendo Beijing, de 2015 a 2030.
Esto significa que en los próximos 15 años se evitarían 304.000 muertes por embolia y 619.000 muertes por enfermedades cardíacas coronarias.
Pero el escenario de los Juegos Olímpicos sólo ganaría la tercera parte de los años de vida obtenidos en un escenario de reducción del tabaquismo de 50 por ciento y la cuarta parte de los del escenario de control de la hipertensión sistólica, indicaron.
Sin embargo, el más agresivo objetivo de control de contaminación de la OMS tendría como resultado mayores ganancias en años de vida que el control del tabaco o de la presión sanguínea sistólica.
"La contaminación atmosférica es un importante factor de riesgo cardiovascular en Beijing y todas las áreas urbanas de China", concluyeron los investigadores en su artículo.
"Pronosticamos que reducir la contaminación atmosférica al nivel de la registrada durante los Juegos Olímpicos de Beijing podría evitar cerca de 900.000 muertes cardiovasculares y ganar alrededor de 4,2 millones de años de vida en las zonas urbanas de China para 2030".
Los hallazgos fueron presentados hoy en la reunión científica anual de la Asociación Estadounidense de Cardiología en Orlando, Florida.