Una mujer Dong reza delante de una hoguera encendida cerca de su Gulou. [Foto: Yang Jie]
La mayoría de los Gulou tienen más de 20 metros de altura y son construidos por hábiles artesanos que no necesitan utilizar planos. Entre los materiales más utilizados destaca la madera, donada por los residentes del lugar donde se erigirá la majestuosa torre. La técnica de machihembrado no utiliza ni un sólo clavo.
Yang, de 42 años, es dueña de un restaurante en un pueblo de mayoría Dong, a los pies del Monte Fanjing, en Jiangkou, provincia de Guizhou. Ella afirma que sus paisanos Dong ensayan bailes, canciones y obras de teatro en la plaza de la Torre del Tambor.
Jiangkou se ha convertido en un destino de ecoturismo por su singular cultura étnica y hermosos paisajes.