En el foro empresarial estuvieron presentes, además, el ministro de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca, y la secretaria de Comercio de Estados Unidos, Penny Pritzker, entre otros altos funcionarios de ambos países.
El gobierno de Obama ha expresado su interés en facilitar el crecimiento del aún incipiente sector privado en la mayor de las Antillas, pero enfrenta las leyes del bloqueo económico, financiero y comercial que Washington decretó contra Cuba de manera unilateral y que ahora sólo pueden ser derogadas por el Congreso norteamericano.
En marzo último, Nueva York fue sede de un foro de 250 inversionistas, emprendedores, líderes de compañías y académicos estadounidenses interesados en conocer las posibilidades de negocios en la isla.
Un mes antes en Washington, el titular de la CCC estimó que cuando cese el bloqueo a la isla habrá un importante flujo comercial bilateral, y las inversiones norteamericanas "serán convenientes en la medida que estén en concordancia con el interés nacional y la soberanía de la isla".
Cálculos oficiales de las autoridades cubanas cifran las necesidades de inversión extranjera directa en 2.000 millones de dólares anuales.