Una economista que se ordenó monje budista sirve a los demás a través de la medicina tradicional china
Yeshe Lahm le gusta caminar por las praderas, 11 de agosto del 2016. [Foto: VCG]
Sichuan,26/08/2016 (El Pueblo en Línea) - Algunos siguen una trayectoria recta, otros comienzan en una dirección y luego enrutan hacia otra y hasta los hay que fundan su propio camino. La monja budista Zheng Xiongying pertenece a la tercera vía.
Después de graduarse en Ciencias Económicas en la Universidad Normal de Leshan, provincia de Sichuan, al igual que sus compañeros ella podía haber elegido el mundo de las cifras y el capital. Sin embargo, se trasladó al Tíbet, específicamente a Garze. Y en el 2012, a los 24 años, se ordenó como monje budista.
Su maestro la bautizó con un nuevo nombre "Yeshe Lahm", que significa hada hermosa e inteligente.
Pero ella no se conformó con ser un monje dedicado a vencer el apego y lograr la iluminación. Quería seguir contribuir más y más a la sociedad.
Sin embargo, Yeshe Lahm sufre de una enfermedad que requiere recibir masajes diarios y utilizar la acupuntura para aliviar los intensos dolores.
"Solía pasar seis horas en autobús cuando iba al Centro de Salud. El dolor era tan insoportable que me hacía llorar. Luego empecé a aprender la acupuntura y la medicina tradicional china. La he estudiado durante 10 años", afirma Yeshe Lahm.
Ahora Yeshe Lahm, junto con otros voluntarios, ayudan a los pacientes.
"Puedo tratar a la gente y, a su vez, aprender de otros médicos. Voy a empezar a trabajar en el hospital este año", aseguró.