Juez muestra parcialidad contra expresidente al aceptar "denuncia inepta" según Instituto Lula
Imagen del 15 de septiembre de 2016 del expresidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, reaccionando durante una conferencia de prensa sobre la denuncia del Ministerio Público Federal contra él y su esposa, Marisa Letícia, por casos de corrupción, en Sao Paulo, Brasil. De acuerdo con información de la prensa local, el juez federal brasileño, Sergio Moro, acepta investigar a Luiz Inácio Lula da Silva por presunta corrupción y lavado de dinero por el caso de corrupción en la empresa Petrobras. Según Sergio Moro existen "suficientes indicios de autoría y materialidad" en la denuncia que la fiscalía presentó la semana pasada en una conferencia de prensa. (Xinhua/Rahel Patrasso)
BRASILIA, 20 sep (Xinhua) -- El Instituto Lula, una organización no gubernamental ligada al expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este martes que, al aceptar una "denuncia inepta" contra el exmandatario, el juez Sergio Moro "confirmó su parcialidad" con relación a Da Silva.
El propio Instituto ya había presentado denuncias contra Moro ante el Supremo Tribunal Federal (STF) y la Corte Internacional de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, por supuesto abuso de poder del magistrado en procedimientos judiciales contra el exmandatario.
"Moro simplemente dio continuidad al espectáculo de persecución política iniciado por los fiscales la semana pasada", señaló el Instituto Lula en un comunicado.
Esta tarde, Moro aceptó la denuncia presentada por los fiscales de la fuerza tarea de la Operación Lava Jato (Lavadero) contra Lula da Silva, su esposa Marisa Leticia y otras seis personas por haberse beneficiado supuestamente de desvíos en la petrolera estatal Petrobras, bajo los cargos de corrupción pasiva y lavado de dinero.
Los fiscales afirman, a pesar de no tener pruebas fehacientes en su contra, que Da Silva y su esposa son los verdaderos propietarios de un departamento en Guarujá, litoral de Sao Paulo, que está a nombre de la constructora OAS, involucrada en el esquema de sobrefacturación en Petrobras.
"El mundo jurídico brasileño sabe que la denuncia de la Fuerza Tarea tiene carácter eminentemente político, siendo el resultado de una serie de arbitrariedades y violaciones de derechos", señala la nota del Instituto, que asegura que después de dos años de investigaciones, no se ha encontrada nada que inculpe al exmandatario.
"Ninguna cuenta secreta, en Brasil o en el exterior; ninguna empresa de fachada, ningún pago ilegal, directo o indirecto", apuntó.
Todo lo que hay, agregó, son hipótesis y "convicciones" de los fiscales, que presentaron una denuncia "inverosímil e insostenible", acogida este martes por "un juzgador notoriamente faccioso con relación a Lula".
En marzo, Moro había determinado que el exmandatario fuera llevado a declarar por la fuerza pública, y luego revelado grabaciones de conversaciones entre Da Silva y la entonces presidenta Dilma Rousseff, en acciones consideradas ilegales.
La Corte Suprema brasileña advirtió sobre la divulgación ilegal de las grabaciones a Moro, quien pidió disculpas.
"El pueblo brasileño y la comunidad internacional saben que Lula es víctima de persecución, de una verdadera cacería judicial, largamente apoyada por la gran prensa brasileña, con objetivos políticos inocultables", afirmó el Instituto Lula.
Según la nota, el objetivo del proceso es "excluir de la vida política al mayor líder popular y al mejor presidente de la historia de Brasil".
En caso de que Moro condene a Lula da Silva por alguno de los cargos que se le imputan, el exmandatario quedaría inhabilitado para presentar candidatura a cargos electivos en las elecciones generales de 2018.