BEIJING, 30 mar (Xinhuanet) -- Cuando se conocieron, ella era una chica de etnia han que llevaba casi siete años estudiando y trabajando en Estados Unidos y él, un joven tibetano que había nacido y crecido en el fondo del Gran Cañón del Yarlung Zangbo y que hacía seis años que era monje en un templo.
No obstante, un sencillo viaje de peregrinación hizo que los dos jóvenes, procedentes de mundos diferentes, se uniesen en su amor y espíritu emprendedor, así como en su determinación de trabajar arduamente con sus paisanos con el objetivo de erradicar la pobreza y vivir una vida feliz.
Ella es You Linshan, una chica nativa de la ciudad china de Xi´an que trabajó como asesora de inversión en un banco extranjero y también creó su propia empresa en el exterior. Él es Tashi, nacido en Chibai, una aldea del distrito de Mainling de la ciudad de Nyingchi.
En 2013, en primavera, la mejor época del año para contemplar las flores del melocotero en Nyingchi, You, muy interesada de la cultura tibetana, regresó de Estados Unidos y aprovechó sus vacaciones para pisar una vez más el Tíbet. Durante este viaje, se dirigió al Gran Cañon del Yarlung Zangbo, uno de los más profundos y largos del mundo.
Un día, al atardecer, You y sus compañeros de viaje llegaron cansados tras su caminata a la pequeña aldea de Chibai, para buscar donde hospedarse entre las familias locales. Se sorprendieron cuando un joven monje, envuelto en su túnica color carmesí, salió a atenderlos.
Era Tashi y, aunque entonces no lo sospechaban, se convertiría en el marido de You. Aquella noche, la joven viajera supo que Tashi vivía en el monasterio Guru, no lejos de su casa, pero había vuelto a la vieja vivienda de sus padres para ayudarles a renovarla.
Tashi es el más pequeño de cinco hermanos y dos hermanas y el único en su familia que sabe hablar mandarín.
Durante ese viaje, You aceptó la invitación de la familia de Tashi para ir con ellos a peregrinar por las prefecturas de Shannan y Xigaze y otras zonas. Por comodidad, el monje cambió sus prendas religiosas por ropas de seglar para el viaje.
Con este aspecto, Tashi parecía un apuesto joven normal del Tíbet a ojos de You. "Si en aquel entonces él hubiera llevado puesta la túnica de monje, quizás no habría habido una historia entre nosotros dos después", señaló You.
Sin embargo, tras ese viaje, los dos jóvenes volvieron a sus respectivas órbitas y continuaron con sus vidas separadas hasta que un día Tashi se puso en contacto con You para anunciarle que se había secularizado por ella.
La noticia hizo a You reflexionar mucho y, finalmente, decidió regresar a la pequeña aldea remota.
Pero se cumplió lo que dice el proberbio: "el ideal es hermoso pero la realidad es flaca". La joven pareja descubrió que Tashi tenía dificultades para empezar su nueva vida. Para él, que había comenzado a estudiar y practicar el budismo a los 17 y había pasado seis años en monasterios, el mundo exterior era totalmente diferente y le era díficil acostumbrarse, por lo que se sentía profundamente confuso
"En los monasterios, todo es sencillo, sin mucho conflicto de interés. Cada uno de nosotros hablaba sobre qué buena cosa hice hoy, qué mala cosa hice hoy, a qué se debe atender más para mejorar, en qué debo fortalecerme. Todos estos temas me gustan mucho, no me gusta nada charlar siempre sobre comer y divertirse. Yo no estaba acostumbrado para nada a eso", explicó Tashi.
Al ver a su marido desconcertado, sin ser capaz de salir de esa confusión sentimental, You le propuso viajar por la región interior del país para que conociese y se acostumbrase poco a poco a su nueva vida. (Continúa)
A lo largo de aquel viaje, Tashi alcanzó logros imprevistos y descubrió un camino que le pareció idóneo para que él y su esposa pudiesen hacer realidad sus sueños.
Un día Tashi le dijo a You: "mi tierra nativa tiene muchas cosas buenas, son capaces de satisfacer la demanda de mucha gente que cuida mucho su salud y necesita especialmente productos orgánicos, puros y sanos".
(Web editor: Rosa Liu, Rocío Huang)