Por Yasef Ananda
Beijing, 12/04/2017 (El Pueblo en Línea) -Uruguay, gran país ganadero con poco más de tres millones de habitantes, conocido por sus verdes pastos y su gran poeta Mario Benedetti, se ha convertido en uno de los importantes socios comerciales de China en Latinoamérica. El pasado año, durante la visita de Estado a China del presidente uruguayo Dr. Tabaré Vázquez, ambos gobiernos elevaron su relación bilateral al nivel de asociación estratégica.
Hoy en día, buscando agilizar el intercambio y la cooperación en todas las áreas posibles, la sintonía política y los proyectos bilaterales crecen y se multiplican. Dentro de esta rauda dinámica, el intercambio educativo-cultural también perfila su promisorio relieve.
“Hace dos años y medio decidimos reimpulsar el proceso de creación del Instituto Confucio en Uruguay. Y el año pasado firmamos el convenio con Hanban, organismo chino responsable de los Institutos Confucio que existen por todo el mundo”, afirmó el Dr. Roberto Markarián, rector de la Universidad de la República del Uruguay, en conferencia de prensa ofrecida en Beijing.
Markarián se encuentra de visita en China invitado por la Universidad de Tsingdao, institución docente que junto a la Universidad de la República del Uruguay, estará a cargo del Instituto Confucio de Montevideo, primero en el país.
“Las obras constructivas de la sede del Instituto Confucio están muy avanzadas. La primera etapa de la obra podría estar lista en dos meses, aunque la apertura oficial será en octubre de este año”, aseguró el rector.
El Instituto Confucio desarrolla un amplio abanico de actividades docentes y culturales, forjando su propio modelo de funcionamiento a partir de las condiciones locales. En sus estatutos, el Instituto Confucio se define como institución educativa, sin fines de lucro, cuyo principal cometido es la promoción del conocimiento entre los pueblos del orbe y la promoción de la lengua y cultura chinas. Entre sus principales funciones, además de la enseñanza, está la formación de profesores, la coordinación de los exámenes de idioma chino y la divulgación de la realidad del gigante asiático, entre otras iniciativas.
De acuerdo al último reporte anual de 2015, existían 500 Institutos Confucios, distribuídos en los cinco continentes del planeta.
“El Instituto Confucio de Montevideo no solamente se limitará a enseñar idioma chino, queremos que sea una plataforma para el conocimiento y la cooperación mutuos”, insistió el rector Markarán, notable matemático e investigador de la teoría del caos, quien además ha tenido alumnos de ascendencia china.
China ha aportado el financiamiento para la remodelación del céntrico inmueble que acogerá al primer Instituto Confucio de Uruguay, la Universidad de Tsingdao aportará los profesores y la Universidad de la República del Uruguay, además del local, financiará los servicios administrativos correspondientes.
“La Asociación Estratégica entre Uruguay y China no puede ser exclusivamente política y económica, tiene que estar complementada por la vida de ambos pueblos. Eso es lo que vamos a promover desde el primer Instituto Confucio de Uruguay”, precisó el Dr. Markarián.
Durante la conferencia de prensa ofrecida en la Embajada de Uruguay en China, se anunció que el director uruguayo del Instituto Confucio será el prestigioso profesor emérito Yim Cheung-Koon, octogenario arquitecto de ascendencia china.
“Sin dudas, la arquitectura china será uno de los elementos culturales que mejor daremos a conocer en el Uruguay”, destacó el rector de la Universidad de la República. “También las artes marciales, la ciencia y la tecnología van a ocupar un papel importante. Como un rasgo raro, dentro del Instituto Confucio estamos construyendo una cocina para enseñar culinaria china.”
Fundada en 1849, la Universidad de la República es un epicentro de vital importancia para el desarrollado social de Uruguay. Actualmente, sus aulas reciben el 80 por ciento de los universitarios uruguayos. Además, un altísimo porcentaje de la innovación que se aplica en el país surge de sus laboratorios de investigación. En relación a los estudios de agronomía, se ha establecido un vínculo importante con China debido a que la producción e importación de alimentos uruguayos es hoy uno de los factores de peso entre ambos países.
“La humanidad es una sola, y a pesar de que vivimos del otro lado del mundo, tenemos que lograr que la diversidad de opiniones y de conocimientos nos permitan acercar el cómo somos y el cómo vivimos. El primer Instituto Confucio de Uruguay debe ser una buena herramienta para ello”, exhortó el Dr. Roberto Markarián, rector de la Universidad de la República del Uruguay.
Durante el encuentro, se presentó un libro que recoge las memorias de la participación de Uruguay en el “Año del Intercambio Cultural China-América Latina y Caribe”, celebrado durante el 2016.