WASHINGTON, 17 ago (Xinhua) -- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó hoy en Twitter la remoción de estatuas confederadas en el país y dijo que es una "tontería".
"Es triste ver cómo se hacen pedazos la historia y la cultura de nuestro gran país con la remoción de nuestros hermosos monumentos y estatuas", dijo Trump en el primero de tres tuits consecutivos.
"No se puede cambiar la historia, pero se puede aprender de ella. Robert E. Lee, Stonewall Jackson... ¿Quién sigue? ¿Washington? ¿Jefferson? Es una tontería", dijo Trump.
Primero Trump ubicó a los fundadores del país al lado de generales confederados en una acalorada conferencia de prensa ofrecida el martes y dijo que la reciente tendencia a retirar los monumentos confederados podría ampliarse a Washington y Jefferson, quienes también fueron propietarios de esclavos.
Grupos nacionalistas blancos expresaron la misma retórica y señalaron que la historia de Estados Unidos está en juego.
"¿Como vamos a llamar a nuestra capital? ¿Washington D. C, Gran Esclavista?" escribió Jared Taylor, editor del grupo nacionalista blanco American Renaissance (Renacimiento Estadounidense) durante una entrevista con CNN.
Pero la analogía fue rechazada por historiadores, quienes señalaron que la explicación más amable del punto de vista de Trump es "ignorancia".
"Ellos lograron algo muy importante. Washington y Jefferson fueron fundamentales para la creación de la nación. Lee y Stonewall no han sido honrados por ese tipo de logros", dijo al Washington Post Jim Grossman, director ejecutivo de la Asociación Histórica Estadounidense.
El debate sobre las estatuas confederadas forma parte de los efectos de la violencia de Charlotesville del fin de semana, cuando grupos nacionalistas blancos y manifestantes contrarios a ellos chocaron luego de que el ayuntamiento de la ciudad decidió retirar la estatua de Robert E. Lee de la ciudad.
Una mujer de 32 años de edad murió atropellada por un nacionalista blanco que embistió a la multitud con su auto y generó revuelo a nivel nacional.
Trump fue objeto de más críticas luego de que dijo que tanto la izquierda como la derecha tenían la culpa del incidente, lo que llevó a republicanos y empresarios importantes a distanciarse de la postura del presidente.